Balones de playa contra el fracking
Uno de los iconos generacionales playeros son los balones de Nivea, azules, hinchables y escurridizos.
Ya no se ven balones de ese tamaño en las playas. Ni, por supuesto, abunda tanto un único modelo. Pero la fuerza de la imagen sigue en muchas retinas.
En este día de playa, quienes estén en La Primera del Sardinero se van a encontrar con una sorpresa: los críticos con la fractura hidráulica, la técnica de extracción de gas a base de fractura de la roca, van a repartir balones con mensajes sobre el fracking. La idea es hacer una ‘balonada’ contra el fracking.
El movimiento apura todas las medidas que puede porque cada vez ven más cerca la huella de la fractura en sus territorios, y temen sus efectos, entre ellos, la liberación de gases contaminantes y la contaminación de los acuíferos subterráneos.
Pese a la ley del Parlamento de Cantabria que la prohíbe en la comunidad, lo cierto es que Repsol empezará en breve los primeros sondeos, exploratorios, en Luena, ya que esa ley sólo afectaba a permisos concedidos por Cantabria y la mayoría de los que están autorizados aquí fueron a cargo del Estado.