Los hosteleros de Peña Herbosa se suman a la colaboración
Los encierros de Tetuán, el Río que vuelve a sonar o el Sol que brilla con la cultura en la calle del Sol (del Carmen, como siguen insistiendo muchos).
A fuerza de crisis, los hosteleros de Santander están aprendiendo que para sacar a la gente a los bares en unos tiempos en los que quien más y quien menos se lo piensa antes de soltar un euro, lo que hay que hacer es colaborar, buscar un factor diferencial y hacer algo entre todos, crear zonas a las que ir y de las que salgan beneficiados todos los negocios de la zona.
Los últimos en apostar por esta fórmula son los hosteleros de otro clásico en las zonas, la Peña Herbosa de los blancos y los vermouths, de locales emblemáticos como La Pirula, Bodegas Mazón o El Solorzáno.
De momento, han empezado con el Oktoberfest, que se ha celebrado este fin de semana y que dura hasta el próximo, con terrazas en la calle (de fondo está la reclamación de una calle semipeatonal), productos alemanes y música en la calle, en una propuesta que ha encontrado una acogida «espectacular», tal y como contaba en Buenos Días Cantabria Juan Peña, portavoz de esta nueva asociación.
Pero ya piensan en alguna cosa más para finales de año, todo con el objetivo de relanzar una zona que creen que en los últimos años había perdido algo de lustre pese a ser una de las más emblemáticas de Santander.
Y a la vez, surge otro reto: la coordinación entre hosteleros. Un ejemplo: está establecido que el último fin de semana de cada mes son los ‘encierros’ de Tetuán. Bien, pues la idea, que ya están empezando a armar en reuniones con hosteleros de otras zonas con colectivos empresariales similares, es no pisarse y coordinar las citas para que haya para todos.
De momento, el clásico «nos vemos en Peña Herbosa» ha salido del baúl de los recuerdos y parece que va a empezar a usarse mucho.