El presidente del Parlamento de Cantabria, José Antonio Cagigas recupera el discurso de la necesaria «ejemplaridad» en la clase política, en un día de la Constitución dedicado a las fuerzas y cuerpos de seguridad del estado (y a las víctimas del terrorismo), con espacio también para apelar a la unidad del Estado ante los retos independentistas.

De esta manera, refuerza su rol de abanderado de la autocrítica – escasa- de la política regional desde el comienzo de una legislatura muy marcada por el estallido de los más escandalosos casos de corrupción. No sólo por Luis Bárcenas y la financiación del PP, sino también por los casos que han afectado a la CEOE o a los sindicatos.

«Si realmente hay un caso de corrupción en nuestras filas y no exigimos responsabilidades… nunca vamos a ser creíbles» asevera, al tiempo que demanda un mayor compromiso «no de palabra sino de hecho»,

En una entrevista concedida a Buenos Días Cantabria, Cagigas cuestiona reiteradamente la actitud de los partidos de denunciar los casos de corrupción entre los oponentes pero no en sus propias filas.

«Si yo limpiara mi casa estupendamente, sería muy fuerte a la hora de pedir que el otro limpie la suya» argumenta el presidente de la cámara regional, que ve «un déficit en este concepto».

«Es necesario una mayor beligerancia. Somos muy beligerantes pidiendo dimisiones en los partidos de enfrente y no lo somos con los nuestros. Tenemos que ser beligerantes en primer lugar con los nuestros» sentencia Cagigas, que apela también a que la Justicia sea «súmamente rápida y que los resuelva».

En su discurso del día de la Constitución, Cagigas es partidario de hablar de política por el propio «descrédito generalizado hacia la política», que achaca a dos razones: la situación económica y los casos de corrupción.

La situación económica «muy complicada» explica, en su opinión, que «todo el mundo mira a los que están gestionando», sobremanera cuando la sociedad lo está pasando «muy mal» y «todas las personas han tenido que entregar algo».

Y en cuanto a los casos de corrupción, aunque Cagigas opina que «solamente» representan a «una minoría», advierte que está todos los días en los medios de comunicación, lo que «crea un estado de opinión» que «lleva a que la gente sea muy crítica».

José Antonio Cagigas en los estudios de Radio Mix FM

A su juicio, los políticos tienen que ser «mucho más transparentes, muy claros y explicar todo lo que hacemos».

Y admite que los partidos «pecan» en el Parlamento de debatir más sobre los intereses de las fuerzas políticas por encima del interés de los ciudadanos. «A veces echo en falta el espíritu de consenso de la Constitución, cuando todo el mundo cedió parte de sus planteamientos y sus ideas para lograr el bien común», reflexiona.

DEDICADO A LAS FUERZAS DE SEGURIDAD

El presidente del Palrlamento de Cantabria considerado «muy pertinente» el homenaje a la Policía Nacional y la Guardia Civil, y por extensión a «todas aquellas personas que trabajan con nosotros para que dispongamos de una seguridad imprescindible para tener libertad».

Un mensaje que llega al hilo de la tramitación de las polémicas leyes de Seguridad Ciudadana y de Seguridad Privada. Sobre este asunto, Cagigas es comprensivo con las manifestaciones excepcionales como los escraches o los rodea el Congreso; aunque apuesta por «ordenar» las protestas.

También ha hablado de la crisis de representatividad de gobernantes, patronal y sindicatos. Aunque cree que «todo está en crisis», no le resta ni un ápice de legitimidad al Parlamento, que contrapone al movimiento 15-M, que «representa a menos gente».

Desde que Gobierna el Partido Popular, en 2011 la dedicatoria del día de la Constitución fue para las personas con algún tipo de discapacidad, y el año pasado (2012), el homenajeado fue el colectivo de los empresarios.

LA UNIDAD DE ESPAÑA

Al igual que hiciera el año pasado, Cagigas refuerza el mensaje de la unidad de España en su discurso. «Estamos bien como estamos y tenemos que intentar seguir trabajando juntos. El futuro tiene que ser juntos».

Y lo refuerza con el argumento del 35º aniversario de la Constitución, que es el periodo más largo de «prosperidad, libertad y democracia» que ha tenido España.