Condena de cien euros de multa para la secretaria general de UGT
La secretaria general de UGT en Cantabria, María Jesús Cedrún, tendrá que pagar una multa de 100 euros por su participación en la huelga general de marzo de 2012.
El Juzgado de lo Penal número 4 de Santander la considera culpable de una falta de coacciones, y ve probado que ella habría colocado clavos a la entrada de Mercasantander.
Algo que María Jesús Cedrún había negado en todo momento, alegando que su función en ese tipo de jornadas es precisamente apaciguar los ánimos.
Sin embargo, la jueza que ha emitido la sentencia resta legitimidad a los testigos aportados por la dirigente sindical, alegando que se trataba de compañeros del sindicato por lo que cuestionaba la imparcialidad del testimonio.
De forma paralela, se apoya en el relato de los agentes de la Policía Nacional, que declararon haber visto a Cedrún, y que “a priori” merecen mayor credibilidad.
Con todo, la sentencia no cumple con las pretensiones de la Fiscalía, que veía los hechos como un delito de coacciones (en lugar de una falta), lo que hubiera supuesto una mayor condena, una multa de 9.450 euros.
No es delito porque no llegó a producirse ningún daño y no reaccionó con insultos o amenazas.
La sentencia incide en que el derecho de huelga tiene su contrapartida en el derecho del trabajador a no secundarla, y recoge que la conducta de la líder de UGT «excedió de cualquier acción informativa».
Cedrún ha descartado presentar recurso contra el fallo, toda vez que se basa en testigos, mayores pruebas.
La sentencia se conoce justo un día antes de que el periodista y activista Paco Gómez Nadal, que se enfrenta a acusaciones de resistencia a la autoridad por su participación en una protesta en una oficina bancaria de Torrelavega.