La Plataforma por lo Público teme que las obras en Valdecilla supongan despidos
No serán en un primer momento, por el miedo a la reacción social, pero se producirán “si no estamos alerta”, según advertía Mercedes Boix, portavoz de la Plataforma, en una protesta a las puertas de un hospital que ahora “ha dejado de pertenecer a la ciudadanía y la sanidad pública para pertenecer a una empresa constructora”.
Unos 50 miembros de la Plataforma y profesionales del centro protestaban en el hospital, en cuyas instalaciones empiezan a verse ya los primeros trabajos de las obras para finalizar la ampliación del centro que se inició hace más de diez años, a raíz del derrumbe.
No les convence la fórmula elegida por el Gobierno de Cantabria: la adjudicación a una empresa (Ferrovial-Siec) de unos cuarenta servicios no sanitarios, a cambio de acabar la obra en un año y cuatro meses (a las puertas de las elecciones autonómicas), en un contrato de 759 millones de euros (sin incluir el IVA) y un plazo de 20 años.
Y no les convence tampoco el proceso por el que se ha llegado esto, ya que, según sostienen desde la Plataforma, las obras fueron paralizadas por el PP, en una “maniobra política” que sirvió de primer paso para acometer la privatización total del hospital.
Esa era la opinión que compartían algunos profesionales del centro participantes en la protesta, como Beatriz, técnico de laboratorio, para quien todo esto supone un “negocio” con “dinero de los cántabros”, o Íñigo, hematólogo, quien hacía hincapié en que en los países en los que se ha optado por privatizar la sanidad, se ha acabado resintiendo la calidad de la asistencia.