La despensa de la Red de Solidaridad Popular está vacía
La Red de Solidaridad Popular de Camargo, una iniciativa de ayuda mutua ciudadana que cuenta con su propio banco de alimentos, lanza un aviso de emergencia: su despensa se encuentra, en estos momentos, vacía.
“Estamos sin alimentos para repartir y tenemos unas 60 personas que necesitan alimentos de primera necesidad”, explica a El Faradio la responsable de la red, Isabel Crespo.
Productos básicos en la alimentación diaria, como leche o comida para el desayuno son las principales demandas que tienen en estos momentos en la Red, una iniciativa muy de base y en estrecho contacto con los distintos movimientos sociales que trabajan en estos momentos en Cantabria.
Por eso, piden a quienes quieran colaborar para paliar este problema que acudan a los locales de la red, en la Avenida de Cantabria, 18 (en La Acera, Maliaño), los martes entre las 10 y las 13 horas, por la mañana, y de 18 a 20 horas por la tarde.
El teléfono de contacto es 696 33 99 40, y también se puede contactar con ellos por correo electrónico, en la dirección redencantabriarsp@gmail.com y en el usuario de Twitter en @RedEnCantabria
Con un expresivo logo que remite a la figura de Robin Hood, la Red de Solidaridad Popular surge como una iniciativa de carácter estatal que tiene el objetivo de cubrir las necesidades que en estos momentos no están atendiendo los poderes públicos.
Y no sólo en materia de alimentación, sino en otras cuestiones como la asesoría jurídica o la educación, por citar algunos ejemplos.
Luego, en cada lugar se materializa de la forma que mejor vean sus miembros. En el caso de Camargo, está muy centrada en la alimentación.
Hasta la fecha, ha venido cumpliendo su función gracias a las donaciones ciudadanas o a través de eventos, como una fiesta solidaria que el año pasado permitió distribuir 1.200 kilos de alimentos entre las familias más necesitadas de Camargo.
En total, se calcula que en el municipio hay más de mil personas cuyas dificultades económicas les están haciendo recurrir a los Servicios Sociales municipales o a organizaciones de ayuda como Cáritas. Sin embargo, de ellos la ayuda sólo llega a aproximadamente la mitad.
Otra de sus iniciativas es el ‘Proyecto Huerto’, la creación de su propio huerto para abastecer tanto a quienes trabajan en él como con destino a la despensa, canalizada a través de las Cestas Solidarias.