Miles de cántabros se suman al debate sobre el modelo de Estado en España
Miles de personas han marchado esta tarde por las calles de Santander en reivindicación del derecho a decidir sobre el modelo de Estado en España, debate abierto a raíz del anuncio de abdicación que ha realizado este lunes el rey Juan Carlos I.
La apertura del proceso de marcha del monarca y su sucesión en la figura del que será Felipe VI han llevado a ciudadanos y organizaciones sociales y políticas a reclamar el derecho a ser consultados, en un referendum, sobre si quieren que el jefe del Estado en España sea un rey, en continuidad con lo actual, u otro modelo como el de una república.
La convocatoria, desatada en las redes sociales de forma espontánea y espoleada también por organizaciones políticas como Podemos, Izquierda Unida y Equo –que han demostrado así una de sus coincidencias programáticas, en plena resaca electoral en Cantabria y debate sobre las posibilidades que se le abrirían a las fuerzas de izquierda si aunaran fuerzas–, o sindicatos como Comisiones Obreras, ha recibido la respuesta de unas 4.000 personas –1.500, en la cifra oficial de la Policía–.
Y se ha transformado de una concentración en la Plaza Porticada, escenario en su día de las acampadas del 15M, en una manifestación hasta el Ayuntamiento y dos sentadas, una frente a la Plaza del Consistorio y otra en la calle Jesús de Monasterio, poco antes de la plaza Juan Carlos I.
Bajo banderas –y todo tipo de vestimentas– tricolores y coreando lemas como «España mañana será republicana» y canciones contra la figura del rey o a favor de la república, han marchado unas 4.000 personas.
Entre ellas, gente mayor, activistas antifranquistas, que recordaban que ya en su día fueron críticos con la transición a la democracia por la cesión que consideran que se hizo desde ciertos sectores para favorecer la convivencia.
Desde esa perspectiva, han visto como ha evolucionado la percepción negativa hacia la monarquía, desde cuando las protestas en su contra apenas tenían capacidad de convocatoria hasta citas como las de este lunes, secundadas por miles de personas.
Veteranos antifranquistas achacaban, en conversación con EL FARADIO, esta tendencia a los escándalos de corrupción que han afectado y desgastado a la corona, aludiendo a un Iñaki Urdangarin que ha sido protagonista destacado de los cánticos que le mandaban «a trabajar al Burguer King».
Junto a estas personas mayores, han marchado también perfiles de otras generaciones, jóvenes que relacionan la abdicación del rey con la crisis institucional y de corrupción que perciben, frente a la cual reclamaban un cambio general en el sistema, para el que pedían también la oportunidad de ser escuchados.
Y alegaban para ello que en su momento, por su juventud, no se les consultó, así como que las circunstancias del momento en que se fraguó la transición son diferentes a las actuales.
Junto a ellos, representantes de partidos políticos de izquierda y también de colectivos sociales como la PAH (la Plataforma de Afectados por las Hipotecas), Cantabria No Se Vende o de las plataformas en defensa de la educación pública, entre otros.
La abdicación la anunciaba a primera hora de la mañana el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y poco después el propio rey Juan Carlos I la ha justificado en la necesidad de un “relevo generacional” hacia la figura del príncipe Felipe, el futuro Felipe VI, y al que se han sucedido los comentarios elogiosos de los representantes del Partido Popular, Partido Socialista, así como de representantes de la patronal, el mundo de la banca y otros representantes sociales.
En paralelo, de forma espontánea, y bajo las etiquetas de Twitter #FelipeNoSerásRey #APorlaTercera o #IIIRepublicaYa, que han ido apareciendo ligadas a la convocatoria a la misma hora – 8 de la tarde- en la Puerta del Sol de Madrid, se han ido sumando mensajes de convocatorias tanto en Santander como en Torrelavega, ciudad en la que el partido ACPT ha colocado una bandera republicana en una ventana que da a la fachada del Ayuntamiento.
A la petición de Izquierda Unida y Podemos en Cantabria, cuarta y tercera fuerza en la región en las recientes elecciones del 25 de mayo, y Equo Cantabria y distintos movimientos sociales, se han sumado a lo largo del día otras entidades Juventudes Socialistas, e incluso uno de los aspirantes al liderazgo del PSOE, José Antonio Pérez Tapias.
En la protesta de Santander participaban militantes socialistas, en contraste con la postura de respaldo que ha expresado públicamente el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien se manifestaba elogiosamente hacia el rey y la monarquía en términos similares a los empleados por los representantes del Partido Popular.
Para la sucesión será necesaria la aprobación de una ley orgánica, que regule la abdicación, y que se abordará de forma exprés en un Consejo de Ministros especial convocado para este martes.
En medios internacionales lo que se está destacando de la abdicación del rey es los escándalos de corrupción que han afectado a la Casa Real o el deterioro de la imagen pública del propio Juan Carlos I en los últimos meses.
La abdicación se produce meses después del fallecimiento del expresidente del Gobierno Adolfo Suárez, también en un contexto de cierta revisión crítica del período histórico de la transición de la dictadura a la democracia, y de aumento de las críticas al modelo bipartidista, que ha experimentado un retroceso que estas opciones experimentaron en las recientes elecciones europeas del 25 de mayo.
Aunque la decisión estaba tomada antes, históricos del movimiento republicano en Cantabria como Miguel Ángel García Cuetos, ‘Miguelón’, vinculan el anuncio con el temor a un futuro escenario político con mayor presencia de partidos minoritarios o de izquierda, cuya presencia haría más difícil la legitimación de los postulados monárquicos por parte de PP y PSOE.