La Plaza del Ayuntamiento estaba debidamente vallada para facilitar la llegada de las peñas tras el desfile por el Paseo Pereda, hasta un lugar central, bajo el balcón consistorial. Por ahí bailaban los cabezudos al ritmo de inmensos altavoces que se encargarían más tarde de competir en decibelios con los gritos de la PAH de Santander.

Los círculos rojos y verdes de la PAH visibles desde todos los ángulos de la Plaza del Ayuntamiento.

Tras la valla, en primera fila, decenas se agrupaban con cartulinas circulares, rojas y verdes, con mensajes de «Amparo se queda», «Amparo no estás sola» o «De la Serna desahucia». Parecían una Peña más, la más ruidosa, la Peña Amparo. También había afectados de la renta social básica.

La PAH había anunciado hace días que protestaría en el chupinazo de la Semana Grande por el desalojo de su vivienda de Amparo Pérez, una anciana de 86 años afectada por una expropiación forzosa en la vaguada de Las Llamas, por la construcción de un vial municipal entre la Avenida de Los Castros y la S-20.

«Ha venido gente que no había visto en mi vida», destacaba un intregrante de la PAH de Santander sobre el poder de convocatoria de la pitada a De la Serna, mientras repartía círculos rojos y verdes junto al nieto de Amparo. Y trompetas de promoción de Coca-Cola, al servicio por esta vez de la PAH, para elevar el ruido cuando llegara el momento. Trompetillas que eran tirachinas comparadas con las torres de altavoces. Algunos de ellos, en previsión de la que se iba a liar, llevaban tapones en los oídos.

La plaza del Ayuntamiento se iba poblando al ritmo de ‘Shot me down’, el último éxito de David Guetta. Ya estaban en su sitio los concejales – el de Cultura, César Torrellas, fotografiándolo todo desde el balcón de la esquina oeste-, los gráficos de los medios de comunicación desde el balcón central, por donde iban cogiendo sitio los representantes de las peñas. En el balcón contiguo aparecían dos pesos pesados del equipo de Gobierno, Gema Igual y César Díaz.

Decenas de activistas en la pitada a De la Serna en el chupinazo de la Semana Grande

Ya eran las 21.30 horas, la hora del chupinazo, y la Peña Amparo seguía a lo suyo: «sí se puede», «Amparo no estás sola», «vergüenza»… El resto de peñas echaba la vista hacia atrás, hacia la Peña Amparo, como sorprendidos por el despliegue pero con todo el respeto. Ni una mala palabra dirigida a la PAH, aunque esta vez robara el protagonismo.

Y en ese momento salió al balcón Sardi, la mascota del Mundial de Vela Santander 2014. Por un momento pareció que el alcalde podía haber delegado en la sardina para encender la mecha del chupinazo. Pero no.

Ahí apareció De la Serna, pantalón vaquero, camisa blanca y pañueluco azul al cuello, la equipación oficial de las fiestas de Santander que, al César lo que es del César, revitalizó al llegar a la Alcaldía. Revitalizar no es necesariamente mejorar. Revitalizar es dar más fuerza y consistencia.

El en vídeo de El Tomavistas de Santander se percibe que fue tanto el ruido durante el discurso que, desde la Peña Amparo, apenas se le pudo entender al alcalde.

«Han sido siete años maravillosos», se intuyó decir a De la Serna. Han sido, en pasado, cuando parece que estamos en días decisivos sobre el candidato del PP en Santander para las próximas elecciones municipales. Sonó a despedida, pero no es la primera vez que De la Serna se pone enigmático.

«La mejor ciudad del mundo en el mejor momento del mundo. Viva Santander» es lo último que se le escuchó a De la Serna antes de prender la mecha del chupinazo y de mucho más. Ahí si que se acabó la protesta.

De repente el Ayuntamiento de Santander se pareció más al de Valencia y desde la fachada trasera empezó a reventar una mini mascletá. Y varios cañones como los de la fiesta de cumpleaños de los hijos de Ana Mato llenaron la plaza de confeti. Azul celeste y blanco, para un efecto visual azulín-pepé muy logrado. Cosas de la identificación partido-ciudad, que está muy perfeccionada.

Y sonó ‘La fuente de Cacho’ a tanto volumen por los altavoces que la gente ni se esforzó en entonar. Y otra vez la voz de Nancy Sinatra y el ritmo guettiano de ‘Shot me down’, con la que la gente puso rumbo al caseteo 2014.

La PAH de Santander se retiró muy satisfecha de la protesta. Seguirán con las acciones para defender la vivienda de Amparo Pérez y contra un proyecto que consideran innecesario. La fecha clave es el 4 de agosto, día señalado para el desalojo.

Panorámica de la pitada de la PAH al alcalde de Santander, Iñigo de la Serna.