||por LUCÍA GÓMEZ GUADALUPE|| El caso de Rosa se asemeja al de muchos otros de los que llegan a la Plataforma de Afectados por las Hipotecas: 57 años de edad, en paro desde hace un año y medio y no puede hacer frente a la hipoteca contratada con La Caixa de 153.000 euros.

Rosa, tras conseguir la dación en pago y el alquiler social

La PAH ha facilitado el diálogo entre La Caixa y Rosa, actuando como intermediaria entre ambas.

Desde el primer momento, al no poder afrontar ninguna otra posibilidad, se pidió la dación en pago con un alquiler social y a través de negociaciones lo han conseguido, hasta firmar con el banco hace un par de semanas.

En principio fue un caso relativamente parecido a otros en los que ha trabajado este colectivo antidesahucios.

Eso sí, hubo que pelearlo desde el principio hasta el final. Desde el principio en que se acometieron acciones en todo el país para presionar a La Caixa, que lograron que la entidad se mostrara más abierta a negociaciones, hasta el mismo día en que iban a firmar el acuerdo.

Ese día, La Caixa comunicaba a Rosa que le reclamaban el pago del IBI (Impuesto de Bienes Inmuebles) del piso del que se desprendía, a pesar de que el banco le había dicho que lo asumían ellos. Pero finalmente, accedieron y el notario excluyó este impuesto, que ascendía a 900 euros.

Aunque la principal evolución se dio en la propia Rosa, al principio muy reacia a la fórmula de la dación en pago (entregar la vivienda para saldar la deuda) y el alquiler social.

Tras comprobar que “cuando tienes ingresos te ponen la alfombra roja y luego la quitan de un golpe”, según explica a EL FARADIO, llegó a la conclusión de que con 57 años y sin recursos no iba a poder con esos gastos, y que cuando se jubilara no podría pagar el coste de una hipoteca durante 30 años.

“Animo a la gente a que si pueden darles una dación en pago que lo hagan, que se dejen de propiedades”. Ahora Rosa lo tiene todo más claro.

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