La adaptación de la célebre frase del asesor de Bill Clinton, James Carville, que centró la campaña del demócrata contra George Bush (padre) en la preocupación por la economía (es la economía, estúpidos) puede servir para entender las elecciones estudiantes en la Universidad: “Es el censo, estúpidos”.

Y es el censo (o los censos) – artículo séptimo del decálogo para ganar las elecciones en una organización- la clave del (nuevo) lío en unas elecciones, de lo que sea, en Cantabria.

El Colectivo de Estudiantes ha denunciado la posible manipulación del proceso, al quedar eliminadas del censo de las elecciones estudiantes al Claustro de la Universidad cinco candidatas, estudiantes de grado de Educación y de Máster, de la oposición a la actual dirección del Consejo de Estudiantes de la Universidad de Cantabria (CEUC).

Tal y como apunta la asociación estudiantil, las elecciones de este año son “muy importantes”, ya que se eligen a los nuevos representantes del Claustro, además de los delegados de centro y representantes en la Junta de Facultad. Todo el próximo 29 de octubre.

De esta manera, el próximo miércoles salen elegidos la totalidad de los miembros (61) de la Asamblea del CEUC: 50 representantes procedentes de las elecciones claustrales y 11 delegados de centro. La Asamblea del Consejo de Estudiantes es como el Parlamento de los alumnos de la UC, donde se vota al presidente de esta organización.

Por una cuestión de número total de alumnos, la Facultad de Educación, circunscripción de las cinco estudiantes borradas del censo, envía al Claustro a siete de los 50 representantes, sólo por detrás de Industriales y Económicas, que tienen ocho claustrales cada una. Así que Educación sería tan importante como Andalucía o Madrid en una elecciones Generales.

En total hay 15 circunscripciones: 11 de centros oficiales, 3 de centros adscritos (CIESE Comillas, Turismo y Fisioterapia) y una más de títulos propios (por ejemplo los estudiantes de máster).

ERRORES INFORMÁTICOS Y DOBLES CENSOS

El actual presidente del CEUC, Carlos Fernández, imputa la eliminación del censo del claustro de estas cinco estudiantes a un “error del servicio de informática” que “no fue a posta”.

En declaraciones a El Faradio, Fernández ha explicado que “un error informático” es el motivo de que se quedaran fuera del censo provisional y, al no recibir reclamaciones en el plazo establecido, entre el 6 y el 8 de octubre, dichos errores “ya no se pueden subsanar”.

En este sentido, ha aconsejado a los estudiantes que quieran presentarse a las elecciones que estén “pendientes del censo”.

Las cinco alumnas de Educación han presentado reclamación ante la Junta Electoral Central de Alumnos (JECA), que este mismo viernes ha resuelto en contra, por llegar fuera de plazo.

Previamente, en un comunicado, el Colectivo de Estudiantes manifestaba su esperanza de “que se trate de un error y sea subsanado”, ya que algunos estudiantes aparecen en unos censos si y en otros no. “Es posible que algunos estudiantes no puedan ni ejercer su derecho al voto”, afirman desde la organización estudiantil.

Ahora mismo, estas estudiantes están borradas del censo del Claustro pero se mantienen en el censo electoral de su facultad (Educación), para elegir delegados de centro y representantes en la Junta de Facultad.

Para que se entienda, es como si pudieran presentarse y votar en unas Municipales y Autonómicas pero no en unas Generales que se celebran el mismo día.

Hay otros dos alumnos que se han quedado fuera del censo claustral, de la Facultad de Económicas, uno porque se ha resuelto el año de gracia el día 10 de octubre (dos días después del final del plazo de reclamaciones) y el otro por un traslado de expediente. Aunque no han reclamado ninguno de ellos.

NO ES LA PRIMERA VEZ

Desde el Colectivo de Estudiantes recuerdan que en las últimas elecciones al Claustro se tuvieron que repetir en varias ocasiones las votaciones, por “claras irregularidades”.

Asimismo, muestran una total indignación con esta “chapuza” de proceso electoral, aunque no descartan que estos hechos sean “algún tipo de jugarreta” para boicotear a potenciales opositores en el Consejo de Estudiantes, ya que “en este tipo de elecciones en la UC tristemente se ha visto ya de todo», según denuncian

El caso es que siempre que hay elecciones en cualquier organización de Cantabria tiene que haber un lío. No falla. Y el lío, esta vez, se sitúa en la Universidad (otra vez).

Entre otros recientes, recordamos el caso de los bombones por los votos, también en las elecciones a la Junta de Facultad de Derecho, hace un año. O las elecciones a la Federación del Metal de CEOE. O el proceso de la FAPA. O la Federación Cántabra de Fútbol. Por no hablar de tremendos líos en procesos anteriores, en la patronal, los sindicatos y hasta en la Asociación de la Prensa.

Vamos, que si hay elecciones a algo, cualquier cosa, hay lío asegurado.

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