La Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria (TSJC) ha resuelto hoy elevar al Supremo la causa que pesa sobre el presidente Ignacio Diego en una de las variantes del caso Pokémon.

Tras una deliberación, el TSJC advierte identidad en los hechos investigados por los Juzgados de Luego y Avilés, y considera que es competencia del Tribunal Supremo al tratarse de hechos cometidos fuera de Cantabria, y tratarse de dos diputados aforados.

El caso que se juzgará en el Supremo implica a Diego y a Francisco Javier Rodríguez Argüeso, consejero de Obras Públicas y Vivienda.

En agosto de 2010, cuando ambos eran parlamentarios en la oposición, pasaron un fin de semana en el balneario de Las Caldas, cuya estancia fue abonada por la empresa Aquagest, concesionaria del servicio de agua en Astillero, según ha aclarado el informe policial.

“UN MISMO PROCEDIMIENTO”

En un auto publicado este viernes el TSJC remite el caso al Tribunal Supremo (TS), después de que en su momento se le fuera remitido por la titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº 3 de Avilés.

Este investiga en el caso Marea a varios directivos de Aquagest por un presunto delito de tráfico de influencias, delito continuado de fraude y exacciones ilegales.

En el caso Pokémon, investigación originaria de la que ha partido Marea, y donde Aquagest también se ha visto implicado, la titular del Juzgado de Instrucción nº 1 de Lugo ya había remitido su causa al Tribunal Supremo, creando una doble vertiente que hoy se ha resuelto.

El TSJC ha destacado la importancia del paso del caso al TS, pues “la identidad de los hechos sobre los que se están tramitando distintas diligencias exigen su resolución en un mismo procedimiento”.

En cuanto a su competencia, la Sala resuelve que, al ser  un presunto delito cometido en Asturias, no cuenta con jurisdicción para tratarlo, ya que su competencia termina fuera del territorio cántabro.

DESMENTIDO POR EL INFORME POLICIAL

El pasado 9 de diciembre, Día Internacional Contra la Corrupción, Diego acudió al Parlamento a explicar su versión de los hechos ocurrido en agosto de 2010 en el balneario de Las Caldas.

Presentó documentación aportada por el propio balneario en la que mostraba que él mismo hizo la reserva con su tarjeta de crédito personal. Según él, un amigo empresario, con el que coincidieron allí ese fin de semana, se le adelantó y pagó sin que sirviera de nada su insistencia negándose.

Al mismo tiempo, en sus declaraciones alegó que no había cohecho pues las contrataciones de Aquagest como concesionaria del agua en El Astillero se aprobaron años antes de que él fuera alcalde de la localidad.

También se defendió, asegurando que en 2010 él no contaba con ningún cargo público, lo que la propia realidad le desmentía.

Ostentaba ya el cargo de Presidente del Partido Popular en Cantabria, y era Diputado del Parlamento de Cantabria, al igual que Rodríguez Argüeso, quien, además, era el portavoz del grupo popular.

El informe policial presentado posteriormente confirmó que ese amigo empresario fue el responsable de Aquagest, y que además fue la propia empresa quien realizó la reserva en el balneario, desmintiendo así la versión parlamentaria de Diego.

IMPAGO DEL IVA

La noticia del balneario y la acusación de cohecho han llevado al PP de Cantabria a la prensa nacional. Además, ha coincidido en el tiempo con la polémica en el Ayuntamiento de Astillero, donde Diego fue alcalde.

Una sentencia del Tribunal Supremo condena a al Consistorio a pagar una multa de más de 700.000 euros por el impago del IVA en una operación urbanística en el año 2003.

Por ello la oposición convocó un Pleno de carácter extraordinario para exigir a Diego y a su sucesor en el cargo, Carlos Cortina, que respondan con su propio patrimonio a esas pérdidas, y no tenga que ser la institución quien lo haga.

Sin embargo, a pesar de que se le acumulen los casos, Ignacio Diego mantiene la calma. El pasado sábado, día 20, trató de transmitírsela a los suyos en la cena anual que el Partido Popular cántabro celebró en el Hotel Santemar.

“Estad tranquilos, como yo lo estoy, y estad ciertos de que vuestro presidente es una persona con principios de honestidad hondamente arraigados”, declaró en un discurso cargado de citas filosóficas y confianza en el futuro. Y es que, de cara a las elecciones autonómicas de mayo de 2015, declaró que la suya es “la única opción de Gobierno para la recuperación”.