La Plataforma Contra la Fractura Hidráulica en Cantabria celebra una pequeña victoria contra los sondeos aprobados en la región. En esta ocasión Ripsa (Repsol Investigaciones Petrolíferas) ha renunciado al sondeo estratigráfico en San Martín de Toranzo, incluido en el Permiso Luena.

Siguiendo su labor habitual, la Asamblea revisa constantemente la sección de la página web del Ministerio de Medio Ambiente donde publican los permisos del Fracking. En su última revisión este permiso había desaparecido, por lo que se pusieron en contacto, vía correo electrónico, con el Ministerio que les comunicó que la empresa había “desistido” en ese proyecto, según informan desde la Asamblea.

Aprovechando los planes que ya tenían reservados para el primer fin de semana con buen tiempo (como parece que será este), han propuesto a los vecinos mimar “el terruño conquistado”.

Y es que han programado una subida a la pradera donde el 31 de enero de 2014 plantaron árboles contra el Fracking. “Teníamos pensado subir en el aniversario, pero el mal tiempo y la nieve han hecho que hayamos aplazado la excursión dos veces”, nos cuenta Carmen, miembro de la Asamblea.

Sin embargo, todo ha sido para bien, pues así  este sábado, 7 de marzo, se aprovechará para celebrar esta pequeña victoria contra los planes de la fractura hidráulica en la región.

“Esa pradera queda a salvo, con sus árboles centenarios y sus árboles de un añito”, se congratulan desde la Asamblea, donde animan a los vecinos a unirse a ellos el sábado a las 10 de la mañana en las Escuelas de San Martín de Toranzo para subir a la pradera y  proteger “los arbolitos que enraizaron contra el fracking”, donde además aprovecharán para brindar “con unas sopas de ajos”.

CONTINÚAN VIGENTES LOS PROYECTOS

Eso sí, desde la Asamblea han querido trasladar a los cántabros que no deben bajar la guardia por esta pequeña victoria, ya que el Permiso Luena “sigue tan vigente como el primer día”. Y que, de hecho, Repsol tiene varios proyectos “en trámite” en la región.

Alertan de que se mantienen en pie una campaña sísmica y un estudio aerogravimétrico que se haría desde aviones “para evitar el encontronazo con la población”. Esta técnica es un método de extracción minero que se hace desde el aire a través de un aparato que mide las diferencias del subsuelo para saber qué zona es más factible para extraer fractura hidráulica.

Desde la Asamblea continúan “preocupados” porque no saben “qué significará” ni qué consecuencias tendrá esta técnica. En todo caso “es un primer paso para el Fracking”, por lo que su oposición al estudio es total.

En Cantabria se contempla también un primer pozo de Fracking en las cabeceras de los valles pasiegos. Y también están pendientes de la zona del nacimiento del Asón, en Soba y Arredondo, ya que el Permiso Angosto proyecta un pozo en la vecina comarca de Espinosa de los Monteros.

En las cabeceras del Ebro, todos los valles del sur de Cantabria (Campooo, Valdeolea, Valdeprado, Valderredible) están amenazados por los ocho sondeos estratigráficos proyectados por el Permiso Bezana (en Burgos), además de los dos primeros pozos del Permiso Bigüenzo.

Asimismo, el Permiso Usapal amenaza el Valle de Trucíos (Vizcaya) y podría afectar a zonas del este de la región. Y concretamente en el oriente, las comarcas que van desde Laredo hasta Castro están muy vigilantes a la concesión del Permiso Galileo, que aún no se ha llevado a cabo.