Los estudiantes vuelven a la huelga
Menos de un mes después de la huelga del 26 de febrero contra la reforma del 3+2, los estudiantes cántabros vuelven a ser llamados a la reivindicación.
La cita será mañana, 24 de febrero, aunque el Colectivo de Estudiantes ya ha organizado un encierro esta misma noche en el Rectorado de la Universidad de Cantabria (UC), que comenzará a partir de las ocho de la tarde.
El encierro, en el que participarán delegados sindicales de Comisiones Obreras (CCOO) de la UC, representantes de estudiantes y militantes de organizaciones estudiantiles de la Universidad, finalizará mañana a las nueve y media de la mañana con la llegada de los piquetes de institutos al Campus. El Colectivo asegura que este acto cuenta con el apoyo del Rector de la UC.
Mañana la comunidad universitaria y de estudiantes de instituto están llamados a distintos actos en contra del 3+2, la nueva reforma de los título de grado que propone el Gobierno.
Esta reforma consiste en reducir las carreras a tres años, añadiendo dos años más de máster con el consiguiente coste económico que supondrá para los alumnos.
La huelga de este martes está convocada en todo el país por organizaciones de estudiantes, sindicatos y órganos de representación estudiantil, a los que además se han sumado los estudiantes de instituto ya que, según declaran “es a los que les va a tocar de lleno la reforma”.
Además del encierro de esta noche, que finalizará a las nueve y media de la mañana con la llegada de los piquetes de institutos, habrá una concentración a las once en el rectorado de la Universidad de Cantabria, donde se presentarán las primeras valoraciones de la huelga.
Por la tarde, a las siete, toda la comunidad educativa está llamada a una manifestación que partirá desde la Consejería de Educación, y a la que invitan a unirse a toda la ciudadanía.
“ESTA REFORMA ES UN PASO MÁS EN LA PRIVATIZACIÓN DE LA UNIVERSIDAD»
La implantación del modelo 3+2 ya estaba recogida en el polémico Plan Bolonia. De hecho, fue uno de los puntos más criticados y en aquel momento el Gobierno decidió mantener la fórmula del 4+1.
El Plan Bolonia busca ofrecer grados más generalistas y centrar toda la especialización en los másteres, algo que los colectivos de estudiantes creen que es una “excusa” para degradar la universidad pública en beneficio de la privada.
Monserrat Gomendio, Secretaria de Estado de Educación, considera que el actual sistema educativo «no es sostenible»
Después del amplio aunque desigual apoyo de la huelga del pasado 26 de febrero, la Secretaria de Estado de Educación, Monserrat Gomendio, acusó a los estudiantes de utilizar “un mensaje muy demagógico” y negó que este sistema conlleve ninguna privatización.
Sí insistió en que es necesario iniciar un debate sobre el sistema educativo, y calificó el actual como “no sostenible”.
El Colectivo de Estudiantes respondió a estas acusaciones afirmando que “lo insostenible no es la universidad pública, son los gobiernos corruptos y el expolio de lo público que hace el Gobierno y la banca”.
Según ellos esta reforma “es un paso más en la privatización de la universidad y hacer negocio con ella como en EEUU”.
LOS INTERINOS ACUSAN AL GOBIERNO DE QUERER DIVIDIRLOS
El pasado 18 de marzo la Plataforma de Interinos mandó una nota de prensa a los medios de comunicación en referencia a las noticias sobre una posible modificación de ciertos aspectos de la normativa de permanencia en las listas de interinidad.
Aunque el colectivo de interinos buscaba esta reforma, critica que no se hayan tenido en cuenta sus propuestas ni se les haya citado como parte implicada.
«Es una medida electoralista orientada a equivocar y distraer a la opinión pública”
Consideran la propuesta “fuera de plazo, de forma y de sentido” y una “medida electoralista orientada a equivocar y distraer a la opinión pública”, especialmente a “aquellos compañeros que quieren entrar en la función pública docente”.
Desde su punto de vista el Gobierno regional pretende dividir al colectivo de internos, que ha sido muy activo en las manifestaciones, huelgas y demás actividades reivindicativas en una legislatura en la que aseguran que el Gobierno se ha negado “sistemáticamente a cualquier acuerdo, imponiendo unilateralmente sus propuestas”.
“Creemos que si se va a modificar la Orden que regula la interinidad docente en Cantabria, tal y como parece deducirse, se debe tener en cuenta la opinión del colectivo”, reclaman.
Denuncian también que en ningún caso se han puesto en contacto con sus “legítimos representantes sindicales”, y además que esta reforma no contempla la retirada “total y sin miramiento de la continuidad pedagógica ni la retirada de la penalización a aquellos compañeros que rechacen jornadas parciales”.
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