El estilo londinense se va buscando aguas más cálidas
Apenas un año ha durado la aventura santanderina de moda londinense de Brick Lane E1. Esta tienda ubicada en el número 18 de la calle Magallanes, en Santander, se despide este jueves de la capital cántabra.
Y lo hace tal y como se abrió el pasado mes de junio, con una fiesta y un buen vino para quienes se acerquen a desear suerte a su dueña, Irene Ruiz Roldán. Y es que no es la historia de un fracaso, sino del fin de una etapa para continuar con una mejor. Brick Lane E1 continuará con su aventura en tierras más cálidas y más regadas de visitantes británicos: Ibiza.
Los adictos a esta moda que trae lo mejor del estilismo alternativo londinense están desolados por perder esta tienda en el callejero de Santander, pero pueden quedarse aliviados sabiendo que tienen productos para rato.
La diferencia estará en que en vez de ir a buscarlos al local, ahora podrán pedirlos por Internet y les llegarán directamente a casa. Y es que, otra de las novedades de esta nueva etapa es que Brick Lane pondrá en marcha una página web en breve, que también contendrá un blog donde contarán todas sus aventuras en la isla más marchosa de España.
Abandonar Santander supone avanzar en su proyecto empresarial y es que, según ha confesado Irene a sus seguidores, ampliar aquí su proyecto resulta demasiado difícil.
Pero tranquilos los nostálgicos. Hasta el jueves tienen tiempo de visitar la tienda, que está de liquidación salvaje pues toda la ropa, bolsos, zapato y complementos están en promoción 2×1, incluidos los de nueva colección. Además, han incluido una zona de mercadillo con toda la decoración y el mobiliario de la tienda, que se podrá adquirir a partir de un euro.
El jueves tendrá lugar la gran ‘desinauguración’, que se celebrará por todo lo alto a partir de las siete de la tarde. Bon voyage (o, mejor dicho, Have a nice trip!), y suerte en la nueva etapa.