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Los trabajadores de Nestor Martin han celebrado este miércoles una asamblea en la que han decidido iniciar contactos con abogados (sindicales y externos) para presentar querellas contra los responsables de su situación, los empresarios de Nestor Martin Andrés de León y Jesús Lavín, la empresa Teka y el presidente del Gobierno de Cantabria, Ignacio Diego.

La decisión se ha adoptado después del encuentro al que accedió Diego, amenazado por la presencia en los actos públicos de campaña de los trabajadores de Nestor Martin, en una reunión celebrada en Peñaherbosa, totalmente insatisfactoria para los empleados de la fábrica de estufas.

Según el Comité de Empresa, el presidente de Cantabria se ha negado a aportar más dinero público a la empresa y, al conocer la intención de los trabajadores de presentar una demanda, Diego responde que personaría al Gobierno como acusación.

La situación es la siguiente: los empleados de Nestor Martin llegaron a esta fábrica después de aceptar aportar al capital más de 3,2 millones de euros de sus indemnizaciones en Teka.

El Gobierno ha aportado liquidez y avales por importe de al menos otros 13 millones de euros, a través del Instituto Cántabro de Finanzas (ICAF).

La condición para el último crédito (3 millones de euros), aprobado en el debate de presupuestos generales para 2015, era la salida de los empresarios De León y Lavín. A partir de ahí, el Ejecutivo contrató a una consultara vasca, HUB Advisory, para que redactara un Plan de Viabilidad, que una vez presentado a los trabajadores plantea 42 despidos.

La principal discrepancia reside en las condiciones del despido. Los trabajadores quieren que se respete la antigüedad que tenían en Teka, porque depositaron todas sus indemnizaciones en Nestor Martin (35.000 euros de media por trabajador). Pero los actuales gestores no se mueven de lo que marca la reforma laboral (20 días por año trabajado, por los 37 que exigen los empleados).

Así las cosas, los trabajadores dan por rotas las negociaciones con la gestora a la que recurrió el Ejecutivo cántabro y se plantean dos vías inmediatas de protesta: en los actos públicos de Ignacio Diego (el sábado estará en Santander Mariano Rajoy) y la querella contra todas las partes que puedan tener responsabilidades.