El Ayuntamiento de Santander ha autorizado este viernes la apertura del vial de la S-20, el vial de Amparo Pérez, que levantó Copsesa tras la expropiación a la finca de esta anciana santanderina, ya fallecida, en la Vaguada de Las Llamas.

Lo ha hecho en una Junta de Gobierno local, de carácter extraordinario y urgente, que se ha celebrado este viernes (15M), a primera hora, y en la que también se ha autorizado el acceso a la pasarela entre la calle Alta y Marqués de la Hermida, sobre las vias de tren,

El vial ya está finalizado.

Este viernes, en principio, estaba prevista la apertura al público del vial de la S-20 entre la Avenida de Los Castros y el centro, con la calle Camilo o Alonso Vega. Durante la mañana, los operarios han estado limpiando la carretera y colocando las últimas señales antes de que el vial quede totalmente acabado.

La obra está ya lista, se han hecho las pruebas de carga y todo está listo, salvo causas de fuerza mayor, para que los primeros vehículos empiecen a circular por una infraestructura que acabó costando 220.000 euros más de lo previsto (tal y como muchos avisaron muchos cuando se adjudicó mediante una baja temeraria y como se aprobó días después de su fallecimiento).

Los trabajos los han ejecutado las empresas Isolux Corsán y Copsesa, la empresa constructora de José Domingo San Emeterio, alcalde de Ramales de la Victoria, miembro del Comité Ejecutivo del Partido Popular cántabro (compañero de partido del de Santander, Íñigo de la Serna).

En la capital las adjudicaciones a Copsesa son tan recurrentes como los sobrecostes de las obras que acomete esta empresa, cuyo propietario, además, está siendo investigado tanto por la justicia como por las instituciones europeas por otro proyecto, el del asfalto ecológico.

Los últimos operarios dan los broches finales antes de la apertura.

Ni ese proyecto, el Green Road, ni las sanciones a las empresas constructoras que se excedan de los costes adjudicados inicialmente, ni el problema de las expropiaciones en los proyectos urbanísticos son asuntos que mencione el programa electoral del Partido Popular de Santander bajo el cual De la Serna aspira a su reelección.

Es época electoral, pero no habrá una inauguración como tal, ya que las prohíbe la ley, lo que no impide que sean las empresas constructoras las que se encarguen de publicitar los servicios que se ponen en servicio.

La apertura coincide con el cuarto aniversario del 15M, la explosión de indignación ciudadana que llenó las plazas de toda España (en Santander, la Porticada) y que finalmente ha acabado llegando a los barrios de la capital. Justo este viernes, en el Prado San Roque hay organizadas actividades reivindicativas, a las que acudirán otros vecinos y miembros de otros movimientos sociales, y otras personas individales como el nieto de Amparo.

Este viernes también coincide con la entrada a prisión de 8 activistas que fueron condenados a tres años de cárcel por el ‘Asalto al Parlament’ catalán. Desde la Asamblea Cántabra por las Libertades y Contra la Represión (LIBRES) han convocado una concentración de repulsa este sábado, a las 12, frente a la Delegación del Gobierno para exigir su libertad.

El domingo se ha organizado un evento reivindicativo, ya que ese día hubiera sido el 87 cumpleaños de Amparo Pérez, por lo que se invita a todos los ciudadanos que quieran a que acudan a la rotonda de Los Castros junto al vial el domingo a las 11 horas con velas, pancartas o lo que se quiera llevar a modo de homenaje a esta anciana santaderina. Los vecinos de Prado San Roque y Río de la Pila, además de sus convecinos de Antonio de Cabezón y Francisco Giner, han confirmado que estarán allí, apoyando a su familia.

LA LUCHA DE AMPARO

Amparo Pérez falleció el pasado 15 de febrero en la Residencia Cantabria, donde estaba ingresada tras un empeoramiento de su estado de salud, muy delicado, tal y como había avisado su médico de cabecera.

Una vecina saluda a Amparo

Previamente, la anciana, de 86 años de edad, se había resistido a la expropiación de su finca, en la Vaguada de Las Llamas, para levantar este vial, paralelo a uno similar a escasos minutos.

Una lucha en la que, como rezaban los carteles que la apoyaban, no estuvo sola.

Primero con la Plataforma de Afectados por las Hipotecas (PAH) de Santander, y luego por otros colectivos, asociaciones, partidos y ciudadanos anónimos, se organizaron numerosas acciones de apoyo: concentraciones, escraches al alcalde, una manifestación ante el inicio del Mundial de Vela, una acampada en su finca, recogidas de firmas…

La respuesta del Ayuntamiento consistió en descalificaciones por el carácter político que le daban a la causa o la búsqueda de interés económica, y no fue hasta días antes de su ingreso en el hospital cuando el alcalde accedió a recibir a la anciana en el Ayuntamiento.

Su causa sirvió de inspiración a otros colectivos que surgieron después, como admitieron ellos mismos:

la lucha contra las expropiaciones en el Prado San Roque (aplazadas hasta después de las elecciones), contra los excesos de la senda costera (que todos consideran un paso previo al proyecto del campo de golf que también se ha pospuesto hasta después de las elecciones) o por las obras en el Parque de La Marga, que evidenciaron la falta de información previa a los vecinos.

En todas ellas concurren problemas de transparencia, acceso a la información y, sobre todo, urbanismo, el gran problema de la ciudad, según se ha revelado en la campaña electoral, en la que todos los partidos de la oposición planean desde la revisión hasta la anulación del Plan General de Ordenación Urbana,

LA EXPROPIACIÓN Y LOS SOBRECOSTES

La oferta económica que se trasladó a Amparo fue posible gracias a que la calificación de los terrenos, en la zona de expansión de la ciudad, los pasó de urbanos a rústicos, lo que supuso que tuvieran menor valor de cara a la indemnización (Hacienda, de cara al pago de impuestos, les daba un valor diferente, una cifra mayor).

El vial se adjudicó en 3,7 millones de euros, después de que Copsesa rebajara su oferta sustancialmente (baja temeraria).

Fue el mismo mecanismo que habían empleado en otro vial paralelo en la misma zona, y en el que se acabaron produciendo sobrecostes que el Tribunal de Cuentas consideró injusticables, pues se referían a condiciones del terreno que ya eran conocidos antes de iniciar los trabajos.

Dicho de otro modo: la rebaja de precios hizo posible la adjudicación y los sobrecostes posteriores le sirvieron de compensación a ese esfuerzo.

Estos segundos sobrecostes se aprobaron en una Junta de Gobierno local, días después del fallecimiento de Amparo, de la que se informó en una nota de prensa en la que no se concretó ni la cantidad del sobrecoste ni el vial exacto del que se trataba, y aludiendo a causas geológicas y geotécnicas de la que no constan informes en el Portal de Transparencia del Ayuntamiento de Santander.