Bustamante arrasa en un lluvioso Concierto Solidario
Pintó mal durante todo el día. Cielos negros, nubes bajas, lloviznas, amenazas… hasta que cayó. Parece costumbre que en Santander llueva si llega la Semana Grande, los conciertos de la Campa de la Magdalena ya están acostumbrados a estar pasados por agua.
Sin embargo, eso no impidió que los miles de asistentes que abarrotaron la Campa disfrutaran del primer concierto del cartel de ‘Música en Grande’, que esta vez coincidió con el Solidario. Las colas se perdían por el horizonte, y los presentes miraban al cielo preocupados. ¿Caería?
Pues sí, cayó. Pero nadie permitió que le ‘aguaran’ la fiesta. Aproximadamente a la hora en punto, cuando las largas filas aún estaban accediendo al recinto, comenzó la actuación de los teloneros, Memorandum.
Este grupo, procedente de Muriedas, está compuesto por Nacho García, Óscar Solís, Pablo Rodríguez y Jesús Llata. Actuaron algo más de media hora, interpretando canciones de su disco ‘No es el sol, es una estrella normal’, que han sacado a la venta este año.
Tras ellos, llegó Paula Rojo, que llegó junto a su banda, sin olvidarse de su inseparable ukelele. La cantante asturiana repitió por segundo año consecutivo en el Concierto Solidario, que el año pasado protagonizó junto a Dani Martin.
En esta ocasión llegó con un disco recién salido del horno, ‘Creer para ver’, que se añade a la lista tras su primer trabajo ‘Érase un sueño’. Durante aproximadamente hora y media la asturiana interpretó canciones de ambos discos con su característico sonido country, como su último single Miedo a Querer, Otro Café o Solo tú, una preciosa canción dedicada a su hermano pequeño.
Y LLEGÓ BUSTAMANTE
Pasadas las once y media de la noche el recinto vibró, esta vez lleno hasta la bandera, cuando la cuenta regresiva llegó al final. La mayoría de los presentes habían acudido a ver a David Bustamante, y la reacción del público así lo hizo notar.
Fue entonces cuando más fuerte empezó a llover y se empezaron a multiplicar los chubasqueros y paraguas, pero los asistentes no permitieron que los ánimos decayeran. Comenzó el concierto con una canción positiva, A partir de hoy, que Bustamante ha incluido en su último disco y que forma parte de la campaña #SuperWoman, destinada a recaudar fondos para la investigación de la cura contra el cáncer de mama.
Tras esta, otra canción del último trabajo, ‘Vivir’. Esta vez una balada suave, Necesito, en la que Bustamante demuestra que en los últimos discos ha aprendido una valiosa lección: no hace falta dejarse la voz en cada concierto para conseguir emocionar.
En estos momentos, tras 15 años de carrera, el cantante controla perfectamente su voz y sabe qué tono y timbre usar en cada canción. Y para soltar chorro de voz, hasta el punto de arrancar aplausos hasta entre los más escépticos, ya tiene Miente, una canción de su álbum ‘A contracorriente’ que es una apuesta segura en todos los conciertos.
De su nuevo disco, el cántabro interpretó algunos temas tan diversos como el divertido Feliz, que le dio un significado especial a los paraguas (ante la duda, visualizad el videoclip), Vivir, esa canción con la que invitó a los presentes a disfrutar de los pequeños momentos y jamás dejar de intentar cumplir sus sueños, y Me Arrepiento, para darle más ritmo a la noche.
Mención aparte merece la canción ‘Los Amigos’, dedicada «a los que no son tan galanes» y no consiguieron quedarse con la chica. En ella Bustamante se sentó al piano, y solo con este y su voz consiguió enmudecer a un público que le dejó cantar muy suave, con mucho sentimiento.
Al igual que sucedió en el concierto del pasado mes de enero en el Palacio de Festivales, Bustamante reinventó canciones antiguas. Cobarde, que fue single de su disco ‘Al Filo de la Irrealidad’, la tocó al principio del concierto dándole un estilo más swing. Nunca es tarde, de ‘A Contracorriente’, ahora es más roquera, un estilo que le sienta mejor a la canción y que la convierte en la más cañera del cantante barquereño.
Y una canción mítica, que Bustamante bromeó asegurando que pocos se sabrían la letra. El público, sin embargo, comenzó a seguir fielmente cada estrofa de Dos Hombres y un Destino mientras movian manos, brazos, paraguas, o bebidas…
Bustamante, al igual que sus teloneros, agradeció la oportunidad de volver a Santander, y máxime participando en el Concierto Solidario, cuyo programa ‘La Gran Recogida de leche; Ningún niño sin bigote’ aportará lo recaudado al Banco de Alimentos de Cantabria.
A pesar de la lluvia el público aguantó hasta el final, y la complicidad fue mutua. Cerca del final, Bustamante se animó ‘a capela’ con una montañesa, habló de sus aventuras en la capital cuando aún era un desconocido adolescente y se hizo una fotografía con el público, una costumbre que lleva a cabo en cada concierto desde que todo se ha vuelto 2.0.
La lluvia prácticamente no amainó en todo el concierto, pero eso no impidió que la fiesta acabara por la puerta grande y hasta los más pequeños aguantaran hasta el final. Un gran inicio de los conciertos de Música en Grande.
Mª Angeles
Una verguenza lo que ocurrio con los paraguas.
la gente no tiene educacion.
Yo voy a ver un concierto,no tengo porque aguantar que la de al lado ,me moje ni me deje ver.
La organizacion no deberia dejar entrar paraguas.
yo en este plan,no volvere.