|| POR ÓSCAR ORTIZ ||

El VII Premio UIMP a la Cinematografía ya tiene destinatario. El consejo de Gobierno de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) ha concedido este premio a la cineasta Josefina Molina

El premio lo recibirá este lunes, 24 de agosto, de las manos del rector de la UIMP, César Nombela. La ceremonia arrancará a las seis de la tarde en el Hall Real del Palacio de la Magdalena. Este año se ha determinado que la laudatio de la galardonada sea a cargo de la filósofa Amelia Valcárcel.

Josefina Molina, ganadora del VII Premio UIMP a la Cinematografía

Este premio ha recaído en años anteriores en grandes cineastas del panorama español. Por ello, en 2014 fue para Manuel Gutiérrez Aragón, en 2013 para Jose Luis Garcia, en 2012 para Alberto Iglesias, en 2011 para Carlos Saura, en 2010 para José Luis Sargadelos y en 2009 para Marisa Paredes.

Este año la figura del premio varía respecto a años anteriores. En esta edición de 2015, una pieza de Sargadelos,que reproduce una cámara de plazas, en un clara intención de homenajear a los comienzos del cine, reemplazará a la claqueta entregada en anteriores ediciones.

UNA DILATADA CARRERA

La directora y guionista Josefina Molina (Córdoba, 1936) dio sus primeros pasos profesionales sobre las tablas,justo cuando fundó ella misma en su ciudad natal la compañía Teatro de Ensayo Medea.

Pronto se cansó del teatro, y apostó por crear su propio universo a travñes del objetivo de una cámara. En 1969 se convirtió en la primera mujer española que logró el título de directora de la Escuela Oficial de Cine.

La televisión también ha sido protagonista en su historia. Llegó a rodar espacios dramáticos para Estudio 1, y, más adelante, realizó series inolvidables como ‘El camino’ (1978), ‘Entre naranjos’ y, sobre todo, ‘Teresa de Jesús’ (1984), interpretada por Concha Velasco.

Tras realizar su primer largometraje, ‘Vera, un cuento cruel’ ,en 1973, llegó a la gran pantalla con ‘Función de noche’ (1981), película en la que Lola Herrera y Daniel Dicenta se interpretaban a sí mismos. Después llegó al drama con ‘histórico Esquilache’ (1989), basado en la obra teatral de Buero Vallejo.

A pesar de pasar por televisión y cine, nunca llegó a abandonar el teatro, y ha dirigido montajes siempre respaldados por el éxito de crítica y de público como es el caso de ‘Delibes Cinco horas’ con Mario, interpretado en otras etapas por Lola Herrera y Natalia Millán. También ha participado en el mundo de la literatura con las novelas Cuestión de azar, En el umbral de la hoguera y Los papeles de Bécquer.