«El asesinato de mujeres, el último peldaño de una escalera de sumisión»
“Disculpen las molestias, pero nos están asesinando”. Con contundencia, desde la Plaza del Ayuntamiento, la Comisión de Violencia de Género alertaba sobre una forma de terrorismo, el terrorismo machista, que es “el último peldaño de una escalera de sumisión y sometimiento”, de “desigualdad” en el trato que reciben las mujeres por parte de los maltratadores.
Las activistas que llevan años trabajando por la igualdad advierten de que “si nos tocan a una, nos tocan a todas”, y lamentan que en los últimos años se ha “bajado la guardia”, en especial con la Ley de Protección Integral contra la Violencia de Género.
Un texto cuya aprobación celebraron, pero del que creen que hay que desarrollar las facetas de prevención, sensibilización y educación. En definitiva, “hay que darle la vuelta”.
Lo dicen los datos: en lo que va de año han muerto asesinadas por sus parejas 37 mujeres (con un caso reciente en Cantabria, el pasado mes de junio), así como ocho menores, a manos de sus padres.
Está siendo un año muy duro, especialmente el verano, con un agosto en el que han sido asesinadas ocho mujeres y dos niñas. Diez asesinatos en veinte días.
Hay rabia e indignación, y eso se notaba en la mayor asistencia a la concentración: más de 300 personas.
Allí estaban activistas históricas y jóvenes, desde la luchadora desde los años del franquismo Marta Peredo hasta miembros de colectivos como las Gildas o Mújeres Jóvenes y representantes de distintos colectivos feministas, sociales o sindicales, como la secretaria general de UGT, María Jesús Cedrún.
Y muchos políticos: empezando por el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla; y la vicepresidenta, la socialista Eva Díaz Tezanos.
Junto a cargos y militantes de sus partidos como la diputada del PRC Matilde Ruiz y la concejala Amparo Coterillo; la directora de la Mujer, Alicia Renedo; la portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Silvia Abascal; el consejero de Educación y Cultura, Ramón Ruiz; el director general de Juventud y Cooperación, Jorge Gutiérrez; y el líder del PSOE de Santander, Pedro Casares, junto a varios concejales de su grupo y representantes institucionales de distintas partes de Cantabria.
Hay que darle una vuelta a la Ley de Protección contra la Violencia de Género»
También se encontraban representantes de Izquierda Unida y Ganemos en Santander, el líder de Podemos José Ramón Blanco, o David González, de Ciudadanos en Santander.
Y estaban, algo comentado entre corrillos, representantes del PP, encabezados por el alcalde Íñigo de la Serna, acompañado de los concejales Pedro Nalda, Miriam Díaz, Carmen Ruiz y María Tejerina.
Una prueba de que la preocupación por la violencia de género está en niveles máximas, y que se ve desde movimientos sociales como una oportunidad para hacerles llegar directamente su mensaje.
Y ese mensaje, expresado por la portavoz de la Comisión de Violencia de Género, Ana Bolado, apuesta por la prevención y por la sensibilización, por actuar desde dos ejes: la educación y la formación de todos los agentes implicados de un modo u otro en la lucha contra los asesinatos de mujeres, desde profesores a policías pasando por jueces.