Trabajos excesivos que provocaron la alarma en la senda costera

La Asamblea en Defensa de la Senda y Costa Norte ha registrado nuevas demandas de información sobre el estado de la liquidación del contrato con Dragados y la redacción de un nuevo proyecto.

Lo han hecho ante el Ayuntamiento de Santander y el Ministerio de Medio Ambiente, la Demarcación de Costas de la Delegación del Gobierno en Cantabria, en cumplimiento de los acuerdos aprobados en la Asamblea General de la asociación, celebrada el pasado lunes.

En esta última reunión acordaron dirigir unas preguntas al Ministerio de Medio Ambiente (como responsable de la obra) y al Ayuntamiento de Santander (como promotor de la obra), con la intención de conocer la cuantía de la liquidación de la obra y su correspondiente desglose, que por el momento ocultan las administraciones.

Desde este movimiento vecinal consideran “necesario por respeto a los ciudadanos” que se dé  a conocer el importe de la liquidación, por una cuestión de “transparencia de las administraciones”.

El proyecto se licitó en casi dos millones de euros, fue adjudicado por baja temeraria de más de un 50% y quedó suspendido por la oposición de los vecinos ante el avance de unas obras ‘excesivas’ que no respetaron distintas leyes.

En este sentido, han enviado preguntas respecto a la redacción del proyecto, que según entiende la Asamblea en Defensa de la Senda Costera, deberá cumplir con normas y leyes urbanísticas y medioambientales, como el POL o el PESC (Plan de Sendas del Gobierno de Cantabria), como ha indicado el Defensor del Pueblo.

Además, la Asamblea confía que el nuevo proyecto sea remitido a todas las administraciones implicadas para su valoración y sea sometido a una información pública “real y participativa”.

Asimismo, inciden en el estado actual de falta de vigilancia y lamentan que las administraciones no hayan dado solución al tránsito de vehículos en determinadas zonas, los vertidos de escombros o la quema de cobre, que “causan un gran daño al territorio”.

De esta manera, denuncian el “abandono de los materiales a su suerte a lo largo de todo el recorrido, que ni siquiera fueron retirados por Costas durante la breve intervención”.

Por este último motivo también se ha pedido a la Demarcación de Costas que proceda a una regulación de los usos y a la señalización para evitar el deterioro y erosión de la Senda, así como el control y vigilancia para que “el uso del entorno sea el adecuado”.