Jornada sobre los efectos del urbanismo con vecinos del Pilón y Prado San Roque
El argumento para derribar las casas del Pilón es que son casas viejas y mal conservadas. Sin embargo, en cuanto las fuertes rachas de viento asolan Cantabria no son precisamente esas viviendas las que se tambalean en General Dávila.
El pasado sábado los vecinos de la zona protagonizaron uno de los varios incidentes que tuvieron patrullando a los bomberos todo el día por Santander.
Fue en el nuevo edificio construido junto al campo del Regimiento, que tiene varias viviendas destinadas a VPO, y que se entregaron el pasado verano.
Al igual que el Palau de las Arts de Valencia, el edificio comenzó a perder parte de su fachada debido al viento, y hasta 6 plaquetas que la componen acabaron estrellándose contra el suelo, con el riesgo de haber podido golpear a cualquier viandante.
«Suerte que en ese momento no pasó nadie, imagínate que hay niños jugando o lo que sea», cuenta a EL FARADIO uno de los vecinos de la zona, que como todos los demás se enteró de lo ocurrido cuando llegaron los bomberos.
El parte del Servicio Municipal de Bomberos recoge en su parte que una vecina del bloque llamó alertando de un desprendimiento de la fachada que estaba llegando a la calle, en la parte sur, ubicada frente a la Bahía de Santander.
A las 15:55 se personó un primer camión con cinco bomberos que acordonaron la zona y la sanearon. Para el proceso utilizaron cuerdas y arneses, lo que supone que debieron tener que descolgarse por la fachada para asegurarse de que no había más riesgo. Una media hora después acudió otro camión, esta vez acompañado por un coche policial para comprobar la zona.
Este vecino también fue testigo de como este martes llegaron varios técnicos con una grúa. «No sé si de la constructora o del Ayuntamiento», explica, «pero ahí estuvieron, subidos a la grúa y dando puñetazos a la fachada para comprobar la resistencia».
«Yo creo que esto al cabo de un año tendrán que tirarlo y poner otro revestimiento, porque los materiales utilizados son malísimos», opina esta vecino ante la cantidad de incidentes en tan poco tiempo en un edificio nuevo.
NO ES EL PRIMER INCIDENTE EN EL EDIFICIO, QUE SE ENTREGÓ HACE 7 MESES
Las viviendas se entregaron el pasado verano y ya han dado problemas desde el principio. El pasado mes de agosto, otra racha de vientos hizo que cinco de las persianas volaran, e incluso se desencajaron las chapas de cinc del tejado.
«Igual que cuando sacudes una sábana por la ventana salían las persianas todas al aire y marchaban volando», relata este vecino recordando ese episodio, por el que también se personaron los bomberos y la policía.
Resulta cuanto menos irónico que el único bloque de viviendas que está teniendo problemas con la racha de vientos de la zona sea precisamente el de nueva construcción. «Aquí quieren tirar chalets y edificios que durarían 200 años más, y esto recién hecho se va abajo», comenta el vecino, que forma parte de los perjudicados del Pilón.
«Aquí quieren tirar chalets y edificios que durarían 200 años más, y esto recién hecho se va abajo»
Este edificio, construido por la promotora Tecniobras en UTE con Fernández Rosillo, está dividido entre viviendas libres y otras protegidas, un porcentaje de las cuales se reserva para realojar a algunos de los propietarios del Prado San Roque y el Río de la Pila.
Estos vecinos también están en proceso de expropiación, aunque actualmente el proyecto se encuentra paralizado temporalmente.
CHARLA SOBRE URBANISMO SALVAJE
Este suceso coincide con la charla que el sábado organiza el Centro Bertolt Brecht sobre la especulación urbanística en la ciudad.
A las 19:30 horas comienza la charla ‘Espculaciones voraces, especulaciones salvajes’, en la que intervendrán los portavoces de los vecinos afectados de las plataformas Salvemos Prado San Roque y Río de la Pila y la del Pilón El Alta.
En este acto explicarán cómo están desarrollando su lucha vecinal, en qué estado se encuentran sus procesos y cuáles serán sus próximos pasos a seguir, como la comisión sobre urbanismo en la que Podemos ha pedido que comparezcan en el Parlamento de Cantabria.
El centro Bertolt Brecht es un espacio ubicado en la calle Isaac Peral, número 3, que fue abierto para ser utilizado por trabajadores y ciudadanos para diferentes actividades, desde culturales hasta sindicales.
“Es un espacio para difundir ideas”, defiende uno de sus miembros, David Aguirre, en declaraciones a Buenas Tardes Cantabria (BTC). “Creemos que es el momento de juntar estas dos luchas y ver qué se puede hacer”, opina sobre este encuentro, pues cree que ambas son “dos ejemplos de injusticias que se están cometiendo en el ámbito industrial”.
El pasado noviembre acogieron una charla en la que participaron ex trabajadores de Nestor Martin-Ecomasa y Sniace, en la que explicaron las similitudes y diferencias de ambos casos que se han llevado por delante decenas de puestos de trabajo.