La presión de la oposición contra la empresa pública SODERCAN, responsable de las políticas de empresa en el Gobierno de Cantabria, no va a cesar tras las explicaciones de la vicepresidenta Eva Díaz Tezanos en el Parlamento sobre su ‘deslocalización’.

En el reparto de áreas del pacto entre PSOE y PRC se desgajó de la Consejería de Industria, en la que estaba, para pasar a la macroconsejería que ostenta la vicepresidenta Eva Díaz Tezanos, junto a otras competencias como universidades, urbanismo y servicios sociales.

Salvador Blanco

Toda la oposición (PP, Ciudadanos y Podemos, que facilitó la investidura de Revilla) se ha pronunciado en contra de este cambio, que fue explicado por Díaz Tezanos en la sesión del pasado lunes.

Las explicaciones no convencieron en los partidos de la oposición, que apuntan no sólo a la ubicación de la empresa, sino a su funcionamiento y sus gestores.

Así, los dos diputados de Ciudadanos en el Parlamento de Cantabria, Rubén Gómez y Juan Ramón Carrancio, han pedido que el Gobierno regional destituya de su cargo al director general de SODERCAN, Salvador Blanco, que ya fue consejero delegado de esta sociedad en la anterior etapa de PSOE y PRC en el Gobierno..

Por este motivo, han registrado una Proposición No de Ley con el fin de que el Parlamento inste al Gobierno de Cantabria a la destitución de Salvador Blanco, hombre vinculado a la Universidad y que llegó a SODERCAN  de la mano de Ángel Agudo (presidente del PSOE), de quien fue alto cargo cuando este era consejero de Economía, y bajo cuya gestión una auditoría señaló irregularidades en la adjudicación de contratos fraccionados.

Además, Ciudadanos reclama que se remitan al Parlamento los currículos de todos los cargos nombrados, no funcionarios, en la presente legislatura en la empresa para su posterior evaluación en la cámara.

“Tenemos dudas sobre la cualificación de alguno de los nombramientos, como el responsable de internacionalización, por ejemplo”, subrayó Gómez.

Para el partido naranja, la gestión en Sodercan han sido objeto de polémica a lo largo de los últimos años.

“Casos como el de GFB (la empresa de fibroyeso en la que el Gobierno se embarcó como socio y que acumuló pérdidas, impagos y EREs sin llegar a funcionar) o el fallido modelo eólico, que se anunció para Cantabria, demuestran la mala gestión realizada en el pasado por la empresa pública y que ha supuesto un grave perjuicio para las arcas de nuestra región”, comentó Rubén Gómez.

Para Ciudadanos, “si bien esta mala gestión no es solo imputable a los años del anterior gobierno PRC-PSOE como demuestra el caso Ecomasa, resulta del todo inadmisible que, para esta nueva andadura, el Gobierno vuelva a poner la dirección general de la empresa en las mismas manos que en el pasado se demostraron incapaces de realizar una buena gestión”.

“Lo que quedó demostrado en la resolución judicial del caso GFB en la que el juez puso de manifiesto que si bien no había indicios de delito sí se había producido una nefasta gestión”, recordaron desde Ciudadanos.

Desde el PSOE respondían acusando a Ciudadanos de “hacer el juego sucio a otros”, en alusión al PP, usando “infamias”, incidiendo en que la sentencia de GFB exoneró a Blanco de responsabilidades penales, y achacando la presión sobre la empresa pública a las acciones sobre el papel del anterior Gobierno en Ecomasa, otro proyecto industrial frustrado tras una inversión millonaria de dinero público (en este caso en una empresa cuyos gestores tenían relación con el expresidente Ignacio Diego), que tendrá su juicio y su comisión de investigación, lo que para el PSOE está en el origen de las acciones en contra de SODERCAN.