Algo huele a podrido, y no son las basuras
Algo huele a podrido, y no son las basuras; es el comportamiento de las élites de este país y de esta comunidad, bien definidas como élites extractivas.
No tenemos nada contra el dinero, la generación de riqueza y las grandes empresas. Al contrario, creemos que son necesarias y que deberían tener un protagonismo destacado en la sociedad, porque no dejan de ser sociedad civil.
El problema viene cuando ese protagonismo no es real y se convierte en un AVASALLAMIENTO que consigue NORMAS A MEDIDA gracias a la SUMISIÓN de las instituciones.
Porque vivimos en la gran paradoja de que los partidos políticos nos tratan de convencer del poder que tienen y lo importantes que son, cuando en realidad, se están comportando como COLABORADORES NECESARIOS de unas élites EXTRACTIVAS y EGOÍSTAS, que buscan por todos los medios LA FORMA DE ESQUILMAR DE SU ENTORNO TODO LO QUE LOS DEMÁS LES HEMOS DADO.
Hasta tal punto de que, esos políticos, con su gestión, lo primero que hacen al abandonar es RENEGAR de la política y tratar por todos los medios de formar parte de ese selecto club de privilegiados del mundo de la empresa.
Leer la prensa estos días, en plena campaña de la renta para el común de los mortales, y en plena declaración del trimestre y sociedades para autónomos y empresas, ES DESOLADOR.
-Tenemos una empresa, OXITAL, cuyo origen sería imposible entender sin influencias políticas, beneficiada por las irregularidades administrativas en una empresa pública, MARE
-Tenemos a su rival, ASCAN, perjudicada en este caso, pero beneficiada en muchos otros, investigada judicialmente por delito fiscal, por planificar cómo no pagar el IVA en una venta en una zona que remite tanto a DETERMINADOS VALORES de una época, como es El Alto del Cuco.
Esa empresa, a la que en breve rescataremos con dinero público por el Puerto de Laredo, nuestro aeropuerto de Castellón, consiguió que se modificaran normas de Santander a medida de los intereses inmobiliarios y económicos de su propietario.
Donde a otros se les rechazan alegaciones al Plan General, ellos consiguieron que la remodelación del frente marítimo para la zona de San Martín, coincidiendo con la inminencia del Mundial de Vela, incluyera mejoras en el entorno de su promoción de viviendas.
De lujo, viviendas de lujo en Playa de San Martín, en una parcela donde puede haber un yacimiento arqueológico.
Suya fue la idea de hacer la Plaza con la que se destruyó una bolera. Y suya fue, por supuesto, la adjudicación de la obra basada en una idea suya aceptada por el Ayuntamiento y QUE NO HAN SIDO CAPACES SIQUIERA DE MANTENER EN BUEN ESTADO.
Esa empresa está donde está gracias a la renegociación de su deuda que le favoreció el Banco Santander, al que hoy leemos que Hacienda le devolvió 1.200 millones de euros en dos años en los que obtuvo más de 10.000 millones de beneficio.
Recordamos, estamos en ese momento en que a muchos nos toca pagar, la renta, el IVA y Sociedades.
-Tenemos más: tenemos a dos expresidentes del Gobierno español volcados en su labor de lobistas: la mujer de Felipe González, señalada por los papeles de Panamá, o el expresidente Aznar defraudando a Hacienda y, no os lo perdáis, intentando convencernos de que ÉL ES LA VICTIMA.
-O la maquinaria del Estado cambiando leyes para favorecer las operaciones empresariales de la, AMIGA, del Rey, como si esto fuera el siglo dieciocho todavía.
Lo peor es eso, que en todos estos casos, tenemos que escuchar a gente CLARAMENTE BENEFICIADA por las instituciones intentando convencernos de que SON LOS PERSEGUIDOS, DE QUE SON LAS VÍCTIMAS DE UNA CONSPIRACIÓN, DE QUE SON LOS DÉBILES.
Entenderéis con todo esto que nos dé un poco igual el toma y daca de las inminentes nuevas elecciones generales y la búsqueda del culpable de que no haya Gobierno.
Nosotros, ahora, preferimos fijarnos en la agenda de verdad de la economía real, la que está pagando sociedades y el trimestre del IVA, la que estos días se preocupa por la gestión del tiempo, por la necesidad de modernizarse, por cómo levantarse después de un traspié.
O la agenda de los que teniendo poco tiempo y pocos recursos están tomando la iniciativa que no tienen unas instituciones (que ya estamos viendo a lo que están) y son ellos los que están abanderando la reivindicación por los problemas de los refugiados.
Por lo menos, ellos, los protagonistas de la agenda real de la empresa, de la iniciativa social, dentro de unos años podrán decir y dirán que por ellos no fue: no podrán reprocharse que ellos no lo intentaron, que no hicieron nada por no verse envueltos en este gango, en este mal olor que lo invade todo.