La Asamblea por la Senda Costera se reúne este martes sin noticias del nuevo proyecto
La Asamblea en Defensa de la Senda Costera y la Costa Norte de Santander se reúne este martes con la sorpresa de conocer qué existe un nuevo proyecto para el polémico proyecto del que, literalmente, se han enterado por la prensa la semana pasada, pero cuyo contenido desconocen.
Un proyecto que llega cuatro meses después del plazo que habían anunciado para su inminente presentación desde la Demarcación de Costas del Ministerio de Medio Ambiente.
Y que centrará buena parte de la reunión convocada para este marte a las 19.30 horas en el Hogar San Pablo, junto al local de la asociación de vecinos de Cueto, por este colectivo que surgió al comprobar los excesos constructivos en el proyecto de lo que iba a ser un paseo natural que no fue debidamente vigilado en su ejecución por sus responsables, el Ministerio de Medio Ambiente y el Ayuntamiento de Santander, con un coste final de 635.029 euros a favor de la constructora Dragados.
Así, en la reunión se abordará este aspecto, junto a otros asuntos en el orden del día, como la organización de nuevas acciones o la celebración de una jornada lúdica.
También se hará un balance de las actuaciones relacionadas con el pago del IBI, el Impuesto de Bienes Inmuebles, en una zona en la que los suelos han pasado de ser clasificados de rústicos a urbanos.
Asimismo, se hablará del Concejo Abierto de Santander, una nueva iniciativa en la ciudad que está aglutinando a todos los colectivos y movimientos sociales y vecinales que están surgiendo en los últimos años en la capital y que han encontrado en el Plan General y el modelo urbanístico su principal elemento de unión, con ejemplos recientes como el vial que se quiere construir en la calle Antonio Cabezón (en Entrehuertas) o el proyecto para construir viviendas en el espacio de La Remonta.
En la zona de la costa norte de Santander también preocupa el reciente cierre, durante el verano, del ambulatorio de Cueto, o el mal estado de las playas menos visibiles de la ciudad, como Mataleñas, El Bocal, La Maruca y la Virgen del Mar, con problemas de limpiez, falta de mantenimiento y vertidos.