Podemos quiere que se respete el convenio firmado entre la empresa pública Sodercan y el Banco Santander, que suponía inyectar 5 millones de euros en una filial de la entidad financiero a cambio de que esta creara y mantuviera 250 puestos de trabajo en las instalaciones del búnker de Medio Cudeyo en las que acaba de presentar un ERE para el 80% de la plantilla.

En un comunicado, recuerdan como estos días se ha conocido la intención de los despidos y también el mensaje de tranquilidad del consejero de Industria, Francisco Martín, de que los contratos de los trabajadores serán subrogados por la nueva empresa adjudicataria de los servicios que presta Cibernos, la multinacional española Indra.

Sin embargo, apuntan en Podemos, «a día de hoy, nadie de esta empresa ha entrado en contacto con los trabajadores para plantear esta cuestión» y «Cibernos tampoco ha informado de esta circunstancia a su todavía plantilla».

El CPD

Por eso, Podemos quiere que el consejero Francisco Martín, no solo hable con los medios, sino que «medie entre el Banco Santander, Indra y Cibernos para garantizar la subrogación de los contratos de los trabajadores afectados».

Además, Podemos incide en que, tal y como ha publicado EL FARADIO; el Centro de Proceso de  Datos (CPD) del Banco Santander contó con una subvención de 5 millones de euros de Sodercan ligados a la creación de 250 puestos de trabajo.

El último pago, de un millón de euros, se realizaría una vez constatado que se hubiera contratado 250 trabajadores. El convenio así mismo, comprometía a que la actividad del Centro tuviera una continuidad de 10 años.

Desde Podemos manifiestan sus «dudas» acerca del cumplimiento de dicho convenio –se despide al 80% de la plantilla y esto son 80 trabajadores, por lo que el total serían cien, en lugar de los 250 reflejados en el convenio) y exigen que se haga cumplir el compromiso adquirido por la filial del Banco Santander, Santander Global Facilities, a la firma del convenio.

Por tanto, instan al gobierno de Cantabria a, por un lado, mediar para garantizar la continuidad de los contratos de los trabajadores de Cibernos y por otro lado, supervisar la subvención concedida por Salvador Blanco al frente de Sodercan para, en caso de que no se hubiera cumplido, obligar, bien a cumplir con el compromiso de contratación, bien a devolver la subvención concedida.