Verónica Ordóñez (Podemos), Juan Ramón Carrancio (Ciudadanos) y José Manuel Igual (PP), en las declaraciones conjuntas convocadas en el Parlamento || Foto: Grupo Parlamentario de Podemos

Partido Popular, Podemos y Ciudadanos, los partidos de la oposición al Gobierno (PRC-PSOE), que en esta legislatura suman mayoría parlamentaria, han escenificado este viernes un acuerdo en un texto para la reforma de la Ley del Suelo que garantice los derechos de realojo y retorno en proyectos urbanísticos como los de El Pilón o Prado San Roque, en Santander.

Las protestas de los vecinos de ambos barrios santanderinos situaron el problema en un primer plano de la actualidad, desde la anterior legislatura, con la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana, que contempla más de 80 actuaciones urbanísticas en la ciudad consolidada.

Pero el equipo de Gobierno del PP elevó el problema al Gobierno de Cantabria, en una reunión con la vicepresidenta y consejera de Urbanismo, la socialista Eva Díaz Tezanos. Los populares en Santander jugaron la baza de la Ley del Suelo, que en la actualidad no contempla los derechos de realojo ni de retorno, como exigen los vecinos de estos barrios de la capital.

Entonces, el Ejecutivo explicó que está redactando una nueva normativa autonómica, que en ningún caso llegaría a tiempo de solucionar los problemas de los vecinos de El Pilón, pero la suma de PP, Podemos y Ciudadanos logró abrir una comisión parlamentaria sobre la reforma de la actual Ley del Suelo.

Una comisión de investigación del urbanismo en Santander, como se ha denominado de forma oficiosa, por la que han desfilado responsables políticos del Gobierno (PRC-PSOE) y del Ayuntamiento (PP).

Pero también han comparecido expertos en urbanismo, ecologistas y vecinos afectados, a petición de Podemos, aunque sus sesiones no fueran retransmitidas por streaming, por un acuerdo entre PP y PSOE que irritó a los afectados.

UNA LEY «MUY AVANZADA»

Ahora, los mismos partidos han escenificado un acuerdo que se plasma en un texto para una Ley que se puede considerar «muy avanzada» en esta materia en el ámbito legislativo estatal, como ha recalcado la portavoz de Podemos en el Parlamento de Cantabria, Verónica Ordóñez.

Un texto que va a «sorprender» porque protege los derechos «no sólamente de los propietarios de viviendas sino también para propietarios de negocios o inquilinos de viviendas, que están en régimen de alquiler».

Para la portavoz de Podemos es la primera ley que sale de una comisión y que «ha escuchado directamente a la ciudadanía», un «motivo muy importante para haber trabajado todo el verano», ha reivindicado, al tiempo que ha criticado al Gobierno, que «ojalá hubiera querido trabajar en esto en lugar de cerrarse en banda a solucionar los problemas de la gente».

Según ha estimado Ordoñez, la reforma de la Ley del Suelo se debatirá para su aprobación el lunes 25 de octubre, para «poder mirar a la gente de El Pilón y Prado San Roque y poder decirles que por nuestra parte hemos hecho hasta el último esfuerzo por intentar llegar a solucionar su problema a tiempo».

SOLUCIONES «NOVEDOSAS»

Para José Manuel Igual (PP) el resultado tras el proceso de enmiendas es una Ley “muy mejorada” que protege al más desfavorecido con soluciones “novedosas” que han nacido de la aportación de los tres grupos y del diálogo y la negociación “hasta la última coma”.

Cualquier actuación sistemática no expropiatoria en suelo urbano va a estar solucionada con esta Ley que “regula al detalle”, según ha dicho, destacando que está pensada para los propietarios de vivienda y también de locales comerciales, a los que “se les da el realojo y el retorno” a partir del concepto “vivienda por vivienda”.

“Todas esas cosas que quedaban al albur del promotor ahora van a estar legisladas, e incluso si el Ayuntamiento modificase el Plan General, ya está sometido a esta Ley”, ha apostillado.

Entre las aplicaciones prácticas de la Ley, el portavoz de Urbanismo del PP ha citado como ejemplo el que garantiza derechos desde que se publican los bienes y los derechos a expropiar.

José Manuel Igual ha recordado que el objetivo de esta Ley desde que el PP planteó su toma en consideración es “ayudar a los vecinos” puesto que el vacío legal que existía en Cantabria por una sentencia del Tribunal Constitucional representaba una desprotección y “obligaba” a legislar “cuanto antes”.

Finalmente ha expresado su confianza en que pueda ser aprobada en el pleno del Parlamento del lunes 24 de octubre. “Después de casi un año que se lleva trabajando esta Ley, es el momento de aprobarla definitivamente”, ha sentenciado, recordando que existen procedimientos urbanísticos como el de El Pilón de Santander que ya han sido iniciados.

PODEMOS PRETENDE «INDULTAR» AL ALCALDE DE SANTANDER, SEGÚN EL PSOE

La portavoz socialista, Silvia Abascal, ha acusado de “oportunistas” a los partidos de la oposición por acordar “a espaldas del PSOE y del PRC” una modificación de la Ley del Suelo que llegará al Parlamento en breve (la nueva que prepara el Gobierno) y que «regula de forma general el derecho al realojo».

Además, en una nota de prensa, ha señalado que Podemos debe explicar por qué pretende “indultar y ser cómplice” de la nefasta acción urbanística del alcalde de Santander, Iñigo de la Serna (PP),

“Esta proposición de ley del PP sólo busca solucionar al Ayuntamiento de Santander el problema generado en el barrio del Pilón cuando el Consistorio tiene medios urbanísticos y de mediación suficientes para hacerlo”, ha afirmado la socialista.

«Podemos miente cuando acusa al PSOE de no querer sumarse al debate y debería explicar cómo los autodenominados adalides de la transparencia y participación no han contado con el PRC ni con el PSOE y han proporcionado el documento a la entrada de la Ponencia cuando no había tiempo material de estudiarlo”, ha denunciado Abascal.

“A diferencia del PP durante la pasada legislatura, este Gobierno ha puesto en marcha todos los mecanismos de participación y se ha puesto a disposición de este Parlamento para dar cuantas explicaciones soliciten los grupos, con lo cual, acusar de falta de diálogo y voluntad de acuerdo es una falacia”, ha lamentado finalmente.