“O consumimos producto local o no habrá relevo generacional en el medio rural”
Sentarse alrededor de una mesa, tranquilos, todos juntos y comiendo alimentos con un origen conocido porque es cercano y de calidad.
Esa es la esencia del movimiento Slow Food, comida lenta, que surgió en los años 90 en Italia por oposición al fast food y que incluso tiene su propia universidad.
Este movimiento se presenta este lunes en Cantabria, gracias al impulso de Jorge, ingeniero agrónomo con una granja de leche en Gama.
La cita es en el restaurante Deluz, perteneciente al grupo con el mismo nombre que siempre ha tratado de poner en valor el producto local en sus cartas en estrecho contacto con productores cántabros, con apuestas también por mejorar la calidad de lo que se sirve en los comedores escolares.
Uno de sus socios, Carlos Zamora, reivindicaba, además de la calidad del producto y sus ventajas para la salud, sus beneficios para la economía local.
“El producto local es muy importante para que tu comunidad salga adelante. O consumimos producto local, de vacas de Polaciones o pasiegas, o desaparece el relevo generacional en un medio rural que lleva años perdiendo población”, explicaba entrevistado en EL FARADIO DE LA TARDE.
Se trata de poner en valor productos, algunos conocidos, y otros no tanto, entre los que citaba la cebolla de Bedoya o la miel de Mirones.
El movimiento se presenta este lunes en una cena en la que estarán sus impulsores, productores locales o cocineros, y que está abierto también a cualquier consumidor preocupado por la salud y la calidad de la alimentación.
EL MENÚ
Para ello, el lunes a las 20.00 horas, se ha preparado una cena “desenfadada y sencilla”, con un menú a base de 14 cosas diferentes y un precio de 30 euros, con productos entre los que se encuentra como “guinda” una croqueta de leche cruda de vaca pasiega con mantequilla de La Jaradilla.
El menú tiene, para empezar, respigos salteados con aritos de Santo Toribio, aros crujientes de cebolla de Bedoya, Risotto de Anchoas, cecina de vaca “eco” curada en Potes, embutido de ciervo y jabalí, Mieles de Cantabria.
También habrá tirabuzones empanados de pescado de roca, huevo de gallina pedresa con pan de vieda de leña Croqueta “Eco” con leche de vaca pasiega, mantequilla casera y harina “eco” y cata con los mismos ingredientes, pero industriales.
Asimismo, contarán con un Guiso de venado de Picos con tinto lebaniego, ensalada de lechugas de aquí con vinagreta de vinagre de tostaquillos y frutos secos cántabros, y taquitos de vaca tudanca a la plancha.
Finalmente, se incluirá como postre helado de queso freso pasiego con arándanos, Helado de vainilla con leche de vaca pasiega y Sorbete de limón de Novales. Para beber habrá Cervezas artesanas y vinos blancos y tintos, también de Cantabria.
Las entradas se pueden comprar en la Taberna Marinera El Machí, en Días Desur Santander o en el Restaurante Deluz. Para los que prefieran hacerlo desde casa también se puede adquirir desde este enlace: https://reserve-me.com/l/1031905.