Las pruebas médicas a menores extranjeros, como la que se le ha hecho al menor camerunés Samuel, son una “aberración jurídica” que van contra sentencias del Supremo y contra la legalidad internacional.

Lo advierte Lucía Zamora, que antes de su faceta como empresaria en el grupo hostelero Deluz fue durante ocho años abogado en la asociación de ayuda a inmigrantes Cantabria Acoge.

Samuel

Y allí, según recordaba a EL FARADIO DE LA MAÑANA, atendió muchos casos de menores sometidos a “indefensión” con “malas prácticas” como estas pruebas.

La abogada incidía en que pruebas como la que se le hizo a Samuel son “un gran error” y “una aberración jurídica”, ya que “España es firmante de la Convención de Derechos del Niño de Naciones Unidas y eso prevalece sobre cualquier ordenamiento jurídico”.

Pero es que además en este caso Samuel tenía pasaporte, y, añadía, la jurisprudencia del Tribunal Supremo no permite hacer pruebas de edad. Por tanto, “no se les puede expulsar de esa manera”, aseveraba.

Es decir, remarcaba, “el problema es que no se ha seguido la ley, porque la Ley deja claro lo que hay que hacer, el ordenamiento jurídico es claro, esto es un problema de mala práctica”.

LA VALIDEZ DE LAS PRUEBAS

En su etapa en Cantabria Acoge se daban “un montón de casos” en los que se hacía la prueba de edad a menores cuando estaban indocumentados (no es el caso de Samuel).

Y al respecto, Zamora señalaba que las pruebas, consistentes en un pinchazo en la muñeca, pensados para menores blancos (con una complexión ósea diferente), e incluso en esos casas había márgenes de error de hasta dos años (lo que en casos en que se tiene 16 puede ser la diferencia entre ser mayor o menor de edad),.

LAS CONSECUENCIAS

Sobre las consecuencias, Lucía Zamora advertía de que con órdenes de expulsión como esta están “lanzando a la marginalidad”, a la “clandestinidad” en el mercado de trabajo por no poder hacerlo de forma regular, o, directamente, “a vías ilegales de vida”.

La empresaria ponía el acento también en los aspectos económicos: durante años los servicios sociales han gastado mucho dinero en proteger a un menor y formarle. “Lo normal es integrarle, si le expulsas ese dinero lo estás lanzando a la basura”, apostillaba.

Pero otra consecuencia es que.“cuando nos saltamos los tratados internaciones nos estamos saltando nuestra identidad, los derechos humanos, el estar unidos en los momentos difíciles. Cada día nos alejamos más de lo que somos y eso poco a poco nos lleva a situaciones como la que hemos visto en Estados Unidos”, reflexionaba.

PROYECTO EN CAMERÚN

Precisamente sobre Camerún, de donde procede Samuel, trata una de las citas de la semana en Deluz, una cena, este mismo miércoles a las 20.00 horas, para recaudar fondos a favor de la asociación ADEC (Ayudar a Despegar-Cantabria), cuya fundadora, Rolande Tiewessie, residente en Cantabria, procede de ese país.

Se trata de “devolver una oportunidad a su tierra”, consiguiendo fondos para crear un orfanato para atender a niños sin padres en su lugar de origen.

Es un proyecto que se hace con gente del pueblo, ayudados por un matrimonio cántabro, y que incluye una granja de pollos, un comedor y una huerta.

PASAJE SEGURO ELEVA EL CASO SAMUEL A REVILLA

Mientras, son casi 95.000 firmas ya para pedir acogida y no expulsión de los Menores Extranjeros No Acompañados, a partir del caso concreto de Samuel (nombre ficticio del menor camerunés) en proceso de expulsión por las decisiones del ICASS que lo han reactivado cuando estaba archivado.

Anoche se ha reunido Pasaje Seguro Cantabria para analizar la repercusión de la carta dirigida al Gobierno y para estudiar nuevas acciones. Entre ellas, la más importante es que van a elevar el asunto al presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, a quien le van a pedir que medie para solucionar la situación de Samuel.

Desde Podemos Cantabria, el diputado José Ramón Blanco, ha pedido la destitución fulminante de todos los responsables políticos del ICASS en este trámite.

Finalmente, el grupo de Pasaje Seguro de la Universidad de Cantabria ha organizado para este jueves, 17 de noviembre, a las 19 horas, una representación teatral a cargo de la agrupación escénica Unos Cuantos.

Se titula ‘El Yogur’ y llevan toda la semana de ensayos finales. La obra aborda los derechos de las personas en busca de refugio.