Un total de 9.940,46 euros limpios fueron entregados, el pasado octubre, por la parte cántabra de la organización de Santander corre por Siria a la Asociación de Apoyo al Pueblo Sirio (AAPS). Las cuentas del evento se pueden consultar desde hoy en la página web Santander.correporsiria.org.

Santander corre por Siria (Fotografía: Amaia Carracedo Arana)

La AAPS cuenta con los contactos en el terreno y la infraestructura para hacer llegar materiales imprescindibles al interior de Siria, donde, según el último cálculo de la ONU, un total de 974.080 personas viven actualmente en zonas asediadas, frente a los 486.700 de hace seis meses y los 393.700 de hace un año.

Según ha denunciado Stephen O’Brien, jefe de ayuda humanitaria de la ONU, “los civiles están siendo aislados, matados de hambre y bombardeados y se les niega atención médica y ayuda humanitaria para que se rindan o huyan”.

El trabajo de la AAPS, con una contraparte imprescindible en Siria que se juega la vida en los repartos, deja historias como esta:

“Abu Kataiba llegó hace dos meses a Alepo para repartir ayuda humanitaria de la AAPS y se quedó atrapado en el infierno.

Con él, otros nueve voluntarios sobreviven en medio de la masacre y reparten a cuentagotas leche, pañales y comida llegada desde España. Ninguna otra ayuda llega del exterior. La ciudad soporta -sitiada y sin alimentos- una brutal campaña de bombardeos que han dejado este fin de semana fuera de servicio los únicos hospitales que seguían en pie, incluido el último centro pediátrico. Desde el viernes, han perdido la vida 150 personas y los ataques se ceban sobre la población más vulnerable, heridos y niños”.

Cuentan, entre sus proyectos, con las escuelas “Esperanza”, que se dotan con los materiales que se envían desde España.

Desgraciadamente, el pasado 7 de noviembre, los misiles se cebaron con el campo de desplazados de Hanbushia, destruyendo el hospital y la escuela Esperanza 7 de la AAPS.

Por fortuna, los niños y niñas no estaban en ese momento en clase, pero los misiles destruyeron todo el material escolar donado por colegios españoles, la carpa/escuela, una ambulancia y diverso material médico.

Para este impresionante trabajo de apoyo a la población siria se movilizó la sociedad civil cántabra. Todos los apoyos que lo hicieron posible, que la organización valora inmensamente, aparecen recogidos ahora en la web de la carrera.