El movimiento antifracking busca ‘caducar’ el permiso más antiguo en Cantabria
La Asociación Contra la Fractura Hidráulica de Cantabria ha iniciado una campaña para solicitar la caducidad de uno de los permisos otorgados en la región.
Este permiso, el más avanzado, es el de Bezana – Bigüenzo, que afecta a la zona de Valderredible y Valdeprado del Río. En diciembre de 2015 cumplió ya los seis años desde que el permiso de investigación se tendría que haber puesto en marcha; y también tiene sondeos y estudios de impacto pendientes que han cumplido los 18 meses más otros 9 de prórroga.
“Todos esos trabajos están fuera del plazo que las diferentes leyes mediambientales e hidrocarburos les obligan a mantener”, explica Carmen González, de la Asamblea Antifracking en una entrevista EL FARADIO DE LA TARDE.
En parecida situación se encuentra el permiso Luena, que caduca en el mes de enero.
Hay otro más reciente, el Galileo, en la zona oriental de Cantabria, que fue solicitado en 2012. “Sin embargo, no tenemos noticia de que hayan dado ningún otro paso”, insiste González, pues se mantienen informadas periódicamente a través de la página web del Ministerio, vía correo y a través de los contactos que mantienen con más asociaciones de afectados en Palencia, Burgos y País Vasco.
Con respecto al permiso Bezana-Bigüenzo, se ha solicitado el permiso para un sondeo en este 2016 para que el sí está dentro de plazo. “Entendemos que si el permiso se caduca, este será también anulado”, ha aseverado la portavoz de la asamblea.
CÓMO COLABORAR CON LA CAMPAÑA
Desde la Asamblea Antifracking han redactado unos documentos dirigidos al Ministerio de Medio Ambiente e Industria, en los que solicitan su caducidad.
Y que, a pesar de que los permisos caducaron, si la administración no formaliza su extinción estos continuarían vigentes a menos que cualquier persona solicite la caducidad.
Para colaborar con la campaña, han colgado la información y los documentos dirigidos al Ministerio de Industria para solicitar la caducidad del permiso y al de Medio Ambiente que controla los estudios y sondeos.
“La gente solo tiene que bajarlos, rellenarlos y presentarlos a cualquier oficina del Estado de estos ministerios” ha explicado la portavoz de la asamblea, que insiste, eso sí, en que los que colaboren se pongan en contacto con ellos para saber cuántas personas han colaborado.