En Mendicouague, los primeros en advertir que la demanda del aparcamiento estaba inflada fueron los propios vecinos.

Fueron vecinos que no formaban parte de las asociaciones vecinales pero que se juntaron en la oposición a este proyecto en la Asociación Parque Mendicouague.

Los vecinos de Mendicouague protestaron durante cuatro años por las vallas que les impidieron disfrutar de su parque.

“Cuando se inició esto era en plena crisis, y era evidente que no tenía venta”, asegura a EL FARADIO Maribel Castro, quien ejerció de portavoz de los vecinos críticos con estas obras.

“Nos reunimos con el presidente de SIEC y les preguntamos si tenían un estudio de mercado de la posibilidad de venta. Nos dijeron que habían calculado vender unas 300 plazas, y les avisamos de que no las iban a vender”.

Su oposición chocó frente a las reclamaciones de las Asociaciones de Vecinos de Los Peñucas y San Francisco, que pedían un aparcamiento subterráneo alegando los problemas que había para aparcar en esta zona obrera, cuyos edificios datan de los años 60.

“Eran lo que pedían las dos directivas de las asociaciones vecinales, que comían de la mano del Ayuntamiento”, insiste Castro, que añade que, en su caso, “avisamos de que un obrero no podía gastar 24.000 euros en una plaza de párking”.

DESCALIFICACIONES A LOS VECINOS CRÍTICOS

Su activismo en contra de acabar con el parque para construir el aparcamiento subterráneo, tuvo una dura respuesta por parte del Ayuntamiento.

Los vecinos han denunciado en multitud de ocasiones que se presionó a asociaciones y a otros vecinos para que no les dejaran locales para reunirse.

Además, sufrieron descalificaciones constantes en prensa; y denunciaron que se había filtrado la información de las personas que firmaron contra el proyecto, con fueron más de 3.000, ofreciendo datos privados y diciendo a qué se dedicaban los críticos, algo que denunciaron ante la Oficina de Protección de Datos.

SUELOS CONTAMINADOS

A cierta oposición vecinal se añadió el encuentro de residuos y suelos contaminados, procedentes de una antigua fábrica de curtidos que se había encontrado en la zona.

Esta revelación se produjo tras la denuncia de los vecinos críticos, y que paralizó el proyecto durante cuatro años. Durante ese tiempo, una valla que delimitaría las obras privó a los vecinos el uso de su parque.

Finalmente el aparcamiento se llevó a cabo por concesión de obra, modificando el proyecto de Parque para que no cambiara en exceso su configuración con respecto al original.

Se lo llevó la UTE formada por SIEC y Apia XXI, antigua empresa del entonces alcalde de Santander, Iñigo de la Serna, hoy ministro de Fomento. La concesión, a 50 años, se adjudicó por 600.000 euros.

UN APARCAMIENTO EN QUIEBRA EN MENOS DE TRES AÑOS

Finalmente, apenas cuatro años después de su inauguración, el tiempo ha demostrado que el parking era innecesario y la concesionaria no cumplió la expectativa de venta de plazas en propiedad, que se limitó a las de ‘cuatro’ dirigentes de las asociaciones tradicionales, entregadas al poder local.

La empresa entró en concurso de acreedores en mayo de 2016, y el pasado 28 de diciembre se publicó en el Boletín del Registro Mercantil (BORME) su liquidación.

La oposición del Ayuntamiento ha denunciado que esto supondrá un “rescate irremediable” que tendrán que asumir las arcas municipales y que pone en manifiesto el fracaso del Consistorio en materia de movilidad.

“Es el resultado de una pésima gestión de movilidad y aparcamiento por parte del equipo de Gobierno”, ha asegurado José María Fuentes-Pila, portavoz del PRC Santander, que ha lamentado también que la alcaldesa Gema Igual “se esconda detrás del discurso de César Díaz en la primera crisis de Santander en su gestión”.

A esta crítica se ha unido el concejal de Izquierda Unida en Santander, Miguel Saro, que insiste en que ha quedado de manifiesto que “ese proyecto y esa ejecución con un coste concreto no respondía a una necesidad de residentes de ocupar ese párking”; y que eso ha conllevado “la desaparición de un parque de apenas 30 años, que era bastante útil para los vecinos y que ha sido sustituido con macetas”.

Por su parte, el Partido Socialista ha denunciado que otros aparcamientos vacíos pueden acabar en una situación “similar” a Mendicouague. “El problema de todo esto es que no solo es el de Mendicouague, otros párkings subterráneos están vacíos, como es de Tetuán o el del distribuidor de La Marga”, ha declarado el portavoz socialista, Pedro Casares, que alerta de que esto “acabarán pagándolo de sus bolsillos los santanderinos”.

Desde Santander Sí Puede, el concejal Antonio Mantecón ponía en valor la lucha vecinal y sus avisos sobre la falta de demandan, además de recordar que en febrero de 2016 hicieron una propuesta para evitar este problema, que sólo fue apoyada por el PRC, y anunciaba que en caso de que el parking de Mendicouague tenga que ser rescatado por el Ayuntamiento, solicitará la apertura de un expediente de responsabilidad patrimonial contra el ex alcalde Iñigo De La Serna y el concejal de urbanismo del consistorio César Díaz.

Incluso Ciudadanos, socio del equipo de Gobierno en casi todas las propuestas, ha manifestado su preocupación por la situación de incertidumbre que ha creado el aparcamiento de Mendicouague.

Su portavoz, David González, ha asegurado que la fase de liquidación era algo previsible tras la escasa demanda de plazas de estacionamiento por parte de los vecinos; y que se debían haber buscado otras alternativas, consensuadas con los vecinos, que aliviaran el problema del aparcamiento en la zona.

“Cabe recordar que los vecinos de la zona apenas mostraron interés por comprar los derechos de una plaza de aparcamiento, y más en tiempos de crisis económica, y siguen aparcando en la calle, contribuyendo aún más a la masificación de coches mal aparcados”, explica González.

“Esperemos que los problemas de la empresa concesionaria no se conviertan en un perjuicio económico para los santanderinos. Es evidente que los problemas de aparcamiento siguen en la zona y convendría sentarse con los vecinos para la búsqueda consensuada de soluciones al problema de aparcamiento en la zona”, declara el concejal de Ciudadanos.

EL PP: “EXISTEN OTRAS EMPRESAS ADJUDICATARIAS DEL CONTRATO QUE ESTÁN OBLIGADAS SOLIDARIAMENTE A CUMPLIRLO”

El equipo de Gobierno, formado por el Partido Popular, ha anunciado que va a trasladar al Juzgado de lo Mercantil Nº1 y a la Administración concursal las conclusiones del informe emitido por los Servicios Jurídicos del Ayuntamiento.

Los informes jurídicos establecen que no procede resolver el contrato de concesión del aparcamiento de Mendicouague por la situación de liquidación de la empresa concursada, ya que “existen otras empresas adjudicatarias y suscriptoras del contrato, que están obligadas solidariamente a cumplirlo y que ni están en situación de insolvencia ni les es transmisible la situación de la empresa concursada”.

El concejal de Urbanismo y portavoz del equipo de Gobierno, César Díaz, ha insistido, una vez más, en que la concesión del aparcamiento de Mendicouague responde a una larga demanda de los vecinos de la zona y que fue la coyuntura económica de los últimos años la que no favoreció la ocupación del aparcamiento.