Vecinos celebran la suspensión del Parque Litoral Norte: “era un absurdo”
La anulación por el Tribunal Supremo del Plan General de Ordenación Urbana de Santander se lleva por delante el proyecto del Parque Litoral Norte, que implicaba un auditorio, un paseo y un campo de golf.
“Nosotros ya habíamos dicho que era un absurdo: incluía un campo de golf que ocupaba la mitad de un espacio natural”, de los pocos libres y naturales en la ciudad, además, valoraba en EL FARADIO DE LA MAÑANA Santiago Sierra, portavoz de la Asamblea en Defensa de la Senda Costera y la Costa Norte de Santander, surgida a raíz de la alarma que generó el fallido y excesivo proyecto de la senda costera.
“Es una buena noticia para el desarrollo de un tercio de la ciudad que ese espacio verde quede con protección”, aseguraba Sierra, incidiendo en que proyectos como el campo de golf “no tienen encaje en un espacio natural”.
Pero “el mayor problema” ha sido “no escuchar” a los ciudadanos, que acaban yendo a los tribunales.
Así que se cae del PGOU el Parque Litoral Norte, pero sigue, por tratarse en realidad de un proyecto más antiguo (la anulación del plan hace volver a las normas de 1.997).
Sus excesos constructivos, con agresivas pasarelas de madera no previstas en el plan original, generaron alarma vecinal que llevaron a los vecinos a ponerse frente a las máquinas para defender un paisaje que consideran patrimonio sentimental e histórico.
Todo consecuencia de un cambio de trazado respecto al discurrir natural de la senda que, según advirtieron los vecinos, tenía como objetivo facilitar, al reagrupar los terrenos, que hubiera espacio para el campo de golf.
La victoria frente al Parque Litoral mantiene vivas las otras luchas de este colectivo:
-que en lugar de retoques, se acometa una revisión integral de la senda costera (se tuvo que anular y volver a retomar, corrigiéndolo), adaptándolo a las normas hechas con posterioridad a su aprobación, como el Plan de Sendas o el Plan de Ordenación del Litoral.
“Seguimos sin escuchar a los ciudadanos y puede que después volvamos a tener problemas jurídicos y legales”, advertía.
-El otro frente, ligado directamente al PGOU, es el efecto del catastrazo, es decir, la traducción a los impuestos vinculados al valor del suelo (ejemplo, el IBI) de los cambios introducidos en el Plan y trasladados al Catastro.
Hay 500 reclamaciones ya presentadas que contradicen la tesis municipal de que no habrá que afrontar reclamaciones, a las que podrían sumarse ahora las de quienes hayan cobrado IBIs incorrectos, o promotores que no puedan desarrollar proyectos previstos.
REACCIONES POLÍTICAS
Tras conocerse el primer listado de proyectos afectados por la anulación del Plan General, el PRC valoraba que el fallo judicial ha obligado al PP de Santander a “aterrizar” hacia un modelo más realista de ciudad al tener que prescindir, forzado, de sus proyectos menos realistas.
El PSOE apunta también en los proyectos en suspenso a la ampliación del Parque Científico y Tecnológico, e Izquierda Unida llamaba la atención sobre que algunos de los proyectos perjudicados, como La Remonta, iban a suponer ingresos con los que contaba el Ayuntamiento.
Y Antonio Mantecón, de Santander Sí Puede, criticaba que no se les hubieran explicado las motivaciones políticas para dar prioridad a unos proyectos por encima de otros.