Más de un centenar de personas han respaldado este martes a los nueve estudiantes imputados por participar en el escrache al expresidente Ignacio Diego cuando hace dos años visitó la Universidad de Cantabria (UC) y se les impidió el acceso a ese acto, en principio abierto a preguntas del público.

Lo han hecho allí mismo, en los exteriores del edificio Interfacultativo, en un acto que se ha convertido en una reivindicación de la libertad de expresión y de la educación pública.

Y en el que han anunciado un parón estudiantil el viernes 3 de febrero, a las 9.30 horas en las enseñanzas medias y superiores.

También han planteado un periodo de reflexión de debate y preguntas en las aulas sobre educación y justicia; así como un foro, a las 11.00 horas en el salón de actos del Interfacultativo en los que serán ellos los que realicen las preguntas sobre lo sucedido y sobre los recortes en la educación pública.

«Ya que no quisieron escuchar a estos 9 jóvenes, nos van a escuchar a todas», ha asegurado Yolanda Ceballos, representante del Colectivo de Estudiantes.

Acto en la UC (Foto: Roberto Ruisánchez)

Acompañados de compañeros de clase, profesores, padres, estudiantes y activistas, han denunciado la «estrategia de represión y criminalización basada en el miedo» con el objetivo de «frenar la protesta social», en una actuación en la que se ha querido «escarmentar a unos pocos para instaurar el miedo y desmovilizarnos a todos».

Durante la rueda de prensa, han denunciado que a raíz de ese acto se encontraron con las «puertas cerradas» de la Universidad, y han preguntado los motivos por los que se les prohibió el acceso al acto.

Los jóvenes imputados aún no han obtenido explicaciones oficiales de la Universidad de Cantabria de por qué vetaron el acceso al acto a casi todos los asistentes en base a criterios desconocidos; si bien «numerosas personas, personal de administración,y servicios, profesores y alumnos nos han mostrado personalmente su apoyo», ha asegurado uno de los jóvenes denunciados.

Tampoco el Gobierno cántabro, que en 2015 cambió a manos del PRC-PSOE se ha pronunciado oficialmente sobre este caso, y los activistas denuncian que algunos de sus miembros se han limitado a mostrar un apoyo poco comprometido a través de redes sociales.

En la rueda de prensa han intervenido Luis Alberto Fernández, profesor titular de la Universidad de Cantabria; José Luis de la Mata, miembro de la FAPA y de la Federación en Defensa de la Educación Pública, y Yolanda Ceballos, del colectivo de estudiantes.

Su caso está pendiente de proceso judicial, después de que un auto de la Audiencia Provincial rechazara sus recursos y sus versiones, priorizando la versión policial y la escolta.

También queda por saber la postura de la Fiscalía, quien se pronunciará los próximos días, y si se aceptan sus vídeos como prueba. El abogado de los jóvenes ha matizado que el expresidente no ha retirado su declaración, por lo que se le considera parte denunciante en el caso.

Sobre este tema, la periodista y activista Patricia Manrique –quien puso voz al vídeo El subjetivo en el que se desmontan las acusaciones–, confiaba, en declaraciones a EL FARADIO DE LA MAÑANA, en que el caso «finalmente se archive» ante las «contradictorias» versiones que ha mostrado la seguridad.

Y advertía sobre la situación de los activistas y estudiantes denunciados, «preocupados», cuya vida está «interrumpida» ante lo que pueda ocurrir, sin que sepan como les puede afectar, por lo que expresaba su deseo de que «toda la comunidad educativa apoye la libertad de expresión» contra lo que considera «un absurdo total».