C’s da luz verde por «responsabilidad» a unos presupuestos «inflados»
El Parlamento de Cantabria ha aprobado este jueves el Presupuesto General de la comunidad autónoma para 2017, por una cifra total de 2.601 millones de euros, con los votos de los dos partidos que sustentan al Gobierno, PRC y PSOE, que al estar en minoría han tenido que pactar la abstención de los dos diputados de Ciudadanos por “responsabilidad”.
El documento económico entrará en vigor en el mes de marzo, con dos meses de retraso sobre lo habitual, después de un largo debate público que ha evolucionado desde el mes de septiembre, desde las exigencias del anterior apoyo externo del bipartito, Podemos, que pedía el cese de Salvador Blanco en SODERCAN; a las ayudas económicas al Racing que no aceptaba Ciudadanos; a la solución a la anulación del Plan General de Ordenación Urbana de Santander que demandaba el PP en la Ley de Acompañamiento; o la escenificación pública de las discrepancias entre los socios, PRC y PSOE, que no se aclaraban sobre el máximo incremento posible de los gastos.
En este sentido, el titular de Economía, el socialista Juan José Sota, que tenía la posición más conservadora en cuanto al incremento del presupuesto al principio del curso– incluso llegó a apostar por la prórroga del presupuesto- , ha asegurado en el debate plenario que la previsión de ingresos del Ejecutivo ha sido “conservadora”.
Es la principal duda que expresan los dos partidos de la oposición, Podemos y PP, que han llegado a asegurar que Cantabria se quedará sin liquidez en los meses de verano con estas cuentas.
Desde Podemos, el diputado Alberto Bolado ha alertado incluso de que Cantabria está “en riesgo de ser intervenida” por su incumplimiento del objetivo del déficit.
Según Bolado, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIREF) recrimina al Gobierno de Cantabria por sobrestimar los recursos transferidos desde el Gobierno de España en 50 millones de euros.
El Partido Popular ha remarcado la “incoherencia” de Ciudadanos, por apoyar unas cuentas a sabiendas de que los presupuestos están “inflados”.
Sota ha justificado que el presupuesto es “una previsión” y que Cantabria también “tiene datos positivos con los que sacar pecho”.