“Liébana tiene mucho para disfrutar”
El Valle de Liébana se prepara para la apertura este domingo de la Puerta del Perdón que marcará el arranque del Año Jubilar, una cita a la que miran instituciones y empresas como forma de conseguir que más visitantes se acerquen a conocer esta comarca y Cantabria en general.
Así que son días de mucho trasiego, de muchos preparativos, no sólo para este fin de semana, sino también para echar el resto durante todo un año.
Tanto para este fin de semana como para citas importantes como el concierto de Jean Michel Jarre “hace meses que resulta difícil encontrar una habitación disponible”, cuenta a EL FARADIO la hostelera Pilar Velarde, que a sus establecimientos La Montaña en Santander y Santa Luzia en Cabuérniga suma los apartamentos rurales Posada Bistruey, en Vega de Liébana.
Tal y como subraya, y tras una buena semana santa, “el Año Lebaniego es bueno para todos”, tanto para Liébana como para el conjunto de Cantabria, al convertirse la cita religiosa en un reclamo para atraer visitantes al valle y sus negocios.
“En Liébana siempre hay mucho que hacer y mucho que disfrutar. Nadie debería perderse Liébana, sea por el motivo que sea: hay buena gente, hace buen ambiente, y hace mejor espacio (se dice que los Picos de Europa paran las nubes), además del paisaje o la posibilidad de hacer rutas”, resume.
Y añade otro factor, la gastronomía, tanto sus quesos y carnes como, por supuesto el cocido lebaniego, con verduras como el repollo, cecina seca curada de cabra u oveja, y un relleno frito de pan con chorizo y perejil, que lo convierten un plato completo en el que han obtenido en varias ocasiones el segundo premio en el concurso que organiza la Asociación de Hostelería.
Otro ejemplo de aportación desde el sector privado en Liébana a la cita del Año Santo es el de Orulisa (Orujo de Liébana, la empresa que produce entre otros el licor Justina, en homenaje a la fundadora de la casa y abuela de la actual responsable, Isabel García Gómez), que ha apostado por abrir las instalaciones de su destilería al público.
Una destilería que está justo a la entrada y salida del valle, frente al Centro de Interpretación de Tama y que a partir de ahora acogerá visitas de turistas, dentro de una tendencia en el sector (la nueva sede de Siderit, de inminente apertura, en Puente Arce, también podrá visitarse por el público, a modo de museo).
Allí podrá conocerse todo el proceso del ciclo de la uva, ver reproducciones exactas de 24 alquitaras de la familia y acabar con una degustación de sus productos, a los que se incorporará vino propio y también el Licor del Peregrino, una mezcla de frutas y aguardiente, tradicional, que se quemaba como la queimada gallega.