“Los pequeños intentamos reparar todos los desperfectos que las grandes han hecho”

Tiempo de lectura: 3 min

El mundo de la construcción está en una crisis que puede llegar a durar más que la de la burbuja inmobiliaria. Se trata, como muchas cosas en este país, de una crisis de valores.

Los abusos de los grandes constructores, las bajas temerarias, su vinculación a los casos de corrupción, la construcción masiva de viviendas, muchas de las cuales han quedado vacías antes de ocuparse, y todo lo que ocupa a la relación entre las grandes empresas y la administración pública ha desprestigiado enormemente el sector.

Al igual que ocurre con los banqueros o los políticos, y también la propia prensa, los constructores forman parte de una de las profesiones peor miradas actualmente por la ciudadanía.

Pero no se puede criminalizar a un sector por las acciones de algunos. Y, por ello, para limpiar también la imagen de una profesión tan prestigiosa como antigua, surgen nuevas iniciativas como Obresa, ‘Obras y Reformas Santander’.

Se trata de un grupo de autónomos, cada uno con una especialidad, que se han unido para poder abarcar más en el sector. “Contamos con todos los servicios”, asegura uno de ellos a EL FARADIO DE LA MAÑANA. “Hemos tratado de hacer un grupo lo más completo posible, y tenemos todos los perfiles: arquitectos, aparejadores, ingenieros, fontanería, electricidad, albañilería…”.

EL MAYOR NEGOCIO, LAS REFORMAS

El mayor negocio que están encontrando en esta nueva etapa es la de reformas y rehabilitaciones de los edificios, que está despuntando en los últimos dos años, aunque también está surgiendo obra nueva.

“Los pequeños tratamos de reparar todos los desperfectos que los grandes han hecho”, dice, ya que la mayoría de las reformas que acometen son de edificios que en plena burbuja “se hicieron a toda prisa”.

La mentalidad en el trabajo de Obresa es diferente. “Prefiero invertir un día más de tiempo y dar un buen servicio”, cuenta, ya que un proyecto “bien ejecutado” puede ser “la mejor publicidad” al correr en el “boca a boca” de los clientes.

También se dedican de una manera especial a ofrecer soluciones completas a los informes de evaluación de los edificios, que han aumentado en los últimos años. “Nosotros ofrecemos el servicio completo”, narra. “Hacemos el informe, ponemos un precio y podemos ejecutar las obras necesarias con todos los especialistas si el cliente está de acuerdo”.

LAS VÍCTIMAS DE LAS BAJAS TEMERARIAS

Los pequeños constructores son víctimas de todo cuanto se ha generado en torno a la construcción. Las adjudicaciones públicas, muchas de ellas otorgadas a la baja, les perjudica enormemente y asegura que, mientras las grandes constructoras recortan en la mano de obra, los pequeños empresarios tienen que poner de su bolsillo. “Te ves obligado a hacer una serie de movimientos y trámites burocráticos que conllevan un coste por intentar abaratar la obra para poder adjudicarla”, se lamenta.

Esta original empresa que ha unido a los autónomos de todas las profesiones del mundo de la construcción puede contactarse en el número 656 750 050 o mediante el correo electrónico obresa@outlook.es.

  • Este espacio es para opinar sobre las noticias y artículos de El Faradio, para comentar, enriquecer y aportar claves para su análisis.
  • No es un espacio para el insulto y la confrontación.
  • El espacio y el tiempo de nuestros lectores son limitados. Respetáis a todos si tratáis de ser concisos y directos.
  • No es el lugar desde donde difundir publicidad ni noticias. Si tienes una historia o rumor que quieras que contrastemos, contacta con el autor de las informaciones por Twitter o envíanos un correo a info@emmedios.com, y nosotros lo verificaremos para poder publicarlo.