PSOE y PRC piden una comisión de investigación sobre el derrumbe
PSOE y PRC han pedido una comisión de investigación independiente sobre el derrumbe de la semana pasada en la calle del Sol, 57, que ha dejado sin hogar a 15 familias santanderinas.
Una comisión cuyas conclusiones quieren elevar a la Fiscalía de Cantabria, tal y como han aseverado en rueda de prensa los portavoz municipales de PSOE, Pedro CAsares; y PRC, José María Fuentes-Pila.
Además, han reclamado la dimisión del concejal de Obras, César Díaz, o su cese por parte de la alcaldesa, Gema Igual, por su actuación en las licencias concedidas para la reforma del local Masters en los bajos de este edificio.
«César Díaz no puede seguir ni un día más en su puesto», ha aseverado el portavoz regionalista, que ha añadido que «si no dimite, es la alcaldesa la que tendrá la obligación de cesarle».
Fuentes-Pila ha instado al equipo de Gobierno del PP a pedir perdón a los vecinos, iniciar la comisión (independiente), poner las conclusiones en manos de la Fiscalía y que haya dimisiones.
Por su parte, el portavoz socialista Pedro Casares ha cargado contra la «dejación clara de funciones» y la «negligencia» por parte del equipo de Gobierno en una gestión en la que percibe «posibles tratos de favor».
Casares también ha apuntado a la custodia de documentos públicos ante la celeridad de los trámites: hubo pasos que se dieron en el mismo día, con el registro a punto de cerrar y, según explicaba, en el funcionamiento del Ayuntamiento lo habitual es que el paso de un departamento a otro tarde un día.
Sus quejas se suman (de forma separada, sin unidad de acción) a las de partidos como Izquierda Unida o Santander Sí Puede (que ha llegado a pedir la inhabilitación de Guillermo Vega para ser contratado por el Ayuntamiento, en aplicación de la Ley del Suelo).
Y van a hacer que tenga que pronunciarse tanto el propio equipo de Gobierno del PP como los tránsfugas de Ciudadanos, hasta hace poco sostén del PP, partido que ahora dice que no se apoyará en ellos.
LA GESTIÓN DE LAS LICENCIAS Y LAS DENUNCIAS
Entre los asuntos que afectan a la gestión municipal en este asunto (recordamos, un derrumbe parcial en un edificio en el que se realizaban obras en el bajo para reformar un bar, el Masters, sin licencia adecuada, ya que hicieron obra mayor, todo esto denunciado con antelación por los vecinos) se encuentran:
-la falta de respuesta a la segunda denuncia vecinal sobre los daños en el edificio, acompañada de un informe técnico de un arquitecto. No se tomó ninguna medida al respecto.
-la celeridad en la concesión de las licencias: hubo trámites que se realizaron en el mismo día. La licencia de obra mayor tardó apenas 11 días
-el retraso en la notificación a la Policía de que había que parar la obra por carecer de licencia: se tardó seis días en darles esa información. Y en ese intervalo de tiempo le dio tiempo a la empresa a que se le diera la licencia.
-la celeridad en la autorización a que se reanudaran las obras: se emitieron informes municipales en apenas dos días para que pudieran volver a ejecutarse.
-César Díaz admitió que no sabía si las obras se paralizaron tras la orden municipal que así dijo que tenía que hacerse al carecer de licencia (finalmente, no pararon nunca).
-César Díaz ofreció como novedad entre las posibles causas el vaciado del suelo del local, que ya había sido planteado por el arquitecto de la comunidad.
«LO FÁCIL ES PEDIR DIMISIONES»
Desde el Ayuntamiento, la alcaldesa Gema Igual respondía que el Ayuntamiento es el principal interesado en esclarecer lo sucedido, y se apoyaba para defenderlo en el expediente abierto a iniciativa suya después del derrumbe.
«Si hay responsabilidades, el Ayuntamiento las va a asumir”, aseveraba en un comunicado en el que no había referencias ni a la petición de comisión de investigación, ni a las acusaciones de trato de favor por los trámites acelerados, ni respuesta a la pregunta de por qué se desoyó la segunda denuncia de los vecinos.
Y en el que mostraba su confianza en su «mano derecha», César Díaz, concejal de Obras, cuya dimisión se ha pedido, al ser su departamento del que emanan tanto las licencias como las decisiones en materia de seguridad sobre los edificios.
“Lo fácil ahora es pedir dimisiones pero lo que tenemos que hacer es buscar soluciones y dejar la política y los intereses partidistas al margen”, ha sentenciado Igual.
“Voy a primar la rigurosidad al oportunismo. Lo primero, para nosotros, es buscar soluciones y es una pena ver cómo, mientras unos nos afanamos por trabajar para que los vecinos tengan sus casas cuanto antes, otros se dedican a hacer política con la difícil situación por la que están atravesando estas familias”, ha declarado en un comunicado cuyo tono, pese a estas expresiones, es llamativamante rebajado tono respecto al que mantiene el Ayuntamiento en sus respuestas a cualquier crítica de la oposición por temas de menor alcance que este (o al empleado por el Consistorio en otros sucesos como el derrumbe del Cabildo o la expropiación de Amparo Pérez)
De momento, el Ayuntamiento está citando a todo el mundo que tiene información o responsabilidad sobre el suceso, y será después cuando se determinen responsabilidades.
Respecto a las acusaciones de trato de favor por la cercanía del equipo de Gobierno con el empresario Guillermo Vega, promotor de la obra, Igual ha recalcado que las relaciones personales quedan a la puerta del Ayuntamiento y que los expedientes tienen su curso en el plano técnico, sin injerencia política alguna.
En este sentido, ha indicado que los expedientes, tanto de licencias como de disciplina urbanística, llegan al concejal una vez que han pasado por los respectivos servicios, cuentan con los informes pertinentes y para que proceda a la firma de la resolución correspondiente, por lo que, de algún modo, está derivando la responsabilidad a los funcionarios.
Además, ha señalado que, en este caso, el concejal desconocía la presentación del segundo escrito por parte de la comunidad, al que se adjuntaba el informe emitido por un arquitecto, ya que ni por parte de los servicios técnicos ni por parte de la propia comunidad de propietarios se le había trasladado la presentación del mismo.
SOBRE EL TERRENO
Sobre el terreno, se ha apuntalado la parte del edificio que da más a la calle del Sol (la parte que se derrumbó era la trasera) y el Ayuntamiento cree que el resto del edificio no habrá sufrido daños. Ya sólo queda un vecino en el albergue municipal, y los vecinos están en manos de un abogado para que defienda sus intereses.
El responsable de las obras, quien pide la licencia, es Dos Imanes Producciones, cuyo responsable es Guillermo Vega, conocido empresario del sector de la hostelería y el ocio en Santander, exdueño del BNS y promotor de los conciertos de Música en Grande. Medios como Eldiariocantabria.es y Mituin han enumerado distintas concesiones o adjudicaciones de sus empresas, como el uso de la campa para los conciertos sin necesidad de concurso público o subvenciones por valor de 100.000 euros del Ayuntamiento por los “precios populares” de las entradas, así como adjudicaciones del anterior Gobierno autonómico del PP por campañas contra el consumo de drugas.
La obra contó con la dirección de obra del estudio de ingeniería Tainsa (la comunidad de propietarios sostiene que al ser obra mayor no eran profesionales competentes) y la ejecuta Millán IC-Multiservicios.