Una de las principales preguntas que se hicieron cuando a finales del pasado mes de septiembre fallecía Manolo de Cos, enlace con la guerrilla de los maquis y defensor del patrimonio cultural o natural, era qué iba a pasar con su archivo.

Manuel de Cos, siempre con la cámara en mano

Porque la imagen más recurrente de Manolo era con una cámara en la mano: con ellas retrató y documento escenarios naturales, costumbres, patrimonio cultural…en lo que se convirtió en una extensión de su mirada comprometida.

Y si bien parte de su archivo lo estaban gestionando entidades como la Fundación Botín, la Biblioteca Nacional o Comisiones Obreras, quedaba la parte principal.

Colectivos como Ecologistas en Acción habían denunciado el “desinterés” institucional al respecto, en uno de los homenajes que Manolo recibió en vida.

Antes de fallecer, Manolo de Cos cedió su archivo al Gobierno de Cantabria, firmando para ello un convenio con la Consejería de Educación, Cultura y Gobierno en unas conversaciones que capitaneó la directora general de Cultural del anterior equipo, Marina Bolado.

Se estima que ese archivo, que incluye tanto fotografías como material audiovisual, abarca unas 40.000 imágenes y 600 horas de material audiovisual en formato digital que recogen diversos momentos de la historia reciente de la Comunidad de Cantabria, así como de situaciones cotidianas, modos de vida y tradición que vienen a ser reflejo y parte del patrimonio inmaterial de la Comunidad.

Así, entre los fondos se encuentran temas como, distintas ferias ganaderas (como Collado de la Hoz y Ruente), un dossier de pinturas de la cueva de Chufín, fotos de la Casona de Santillana o los Picos de Europa, imágenes de Santander, su Bahía y animales en La Magdalena, fotos del navegante Vital Alsar…, según información de la Consejería de Cultura consultada por EL FARADIO.

Así que ahora queda el siguiente paso una vez que se materialice la cesión firmada en el convenio, que es, en primer lugar, la catalogación del ingente material que había ido armando Manolo de Cos, para luego tomar medidas que contribuyan, en primer lugar, a su conservación, y, después, a su difusión.

La firma del convenio se enmarca en la política de rehabilitación, mantenimiento, conservación y divulgación del patrimonio histórico, cultural y natural de Cantabria, a través tanto de acciones directas de la Consejería como estableciendo convenios de colaboración entre instituciones públicas y privadas.

Desde la Consejería de Cultura se valora que se trata de un material “de gran valor para el estudio de nuestras tradiciones y costumbres que ayudará a investigadores al estudio de nuestro patrimonio etnográfico”, además de apuntarse que se trata del “mejor homenaje que se puede hacer a la memoria de uno de los referentes de la lucha por la libertad en nuestra comunidad”.

MANOLO DE COS, EL PATRIMONIO DE LA LIBERTAD

Viñeta del Paisá tras la muerte de Manolo, con su hermano Jesús.

Nacido en 1920 en Rábago, era hermano del guerrillero Jesús de Cos y fue enlace de la guerrila, al igual que su hermana Magdalena. Su padre, Donato, murió en el campo de concentración de Mauthausen.

De joven fue enlace con la guerrilla que desde los montes combatía la dictadura franquista –los emboscados o maquis—y sufrió la represión del franquismo. Su compromiso le hizo llegar con los años a la documentación del patrimonio natural o cultual, siendo descubridor de la cueva de Chufín y una de las voces que reivindicó la puesta en valor de El Soplao.

Quienes le trataron destacan su generosidad, al arriesgarse ayudando en muchas ocasiones a personas que no conocía, o documentando desde su labor como fotógrafo causas que beneficiaban al conjunto de la sociedad.

EL ENLACE CON LA GUERRILLA

De pequeño fue pastor y cuando cumplió 18 años fue llamado al servicio militar, pero fue encarcelado por supuestamente haber profanado iglesias en una acusación que fue desmontado al aparecer, escondidas en un pajar, las imágenes que dijeron que había destruido.

Sus problemas no acabaron ahí, pues el salvoconducto que se le había concedido le fue robado por un grupo de falangistas, que lo llevaron detenido al campo de concentración que hubo en la campa de La Magdalena. Tuvo que marcharse de Cantabria, constantemente acosado por el régimen.

Empezó a actuar de enlace con la guerrilla (con la Brigada Machosa), ayudándoles en distintas tareas, entre ellas pasando guerrilleros a Francia, entre otros a su propio hermano, Jesús de Cos, hasta que es delatado por un confidente y posteriormente detenido y torturado.

MEDIO AMBIENTE Y PATRIMONIO

Desde los años 1940, Manuel de Cos se acercó a la fotografía para documentar su entorno y de ahí viró al ecologismo, al denunciar una tala indiscriminada de árboles en los montes.

Paralelamente el fotógrafo se encargó de documentar, siempre de forma autogestionada, la vida rural y la etnografía y folklore de Cantabria, con especial atención a las mujeres, a las que homenajea constantemente por su sufrimiento durante la posguerra.

Su gran proyecto fue la elaboración de un museo etnográfico a raíz de su descubrimiento de la Cueva de Chufín y la reivindicación turística de la Cueva de El Soplao, que emprendió de forma altruista y posteriormente abandonó por falta de medios y ayudas públicas.

Militante del Partido Comunista, durante la Transición se encargó de documentar el proceso de legalización de los partidos políticos.