El proyecto Rederas de Eureka finaliza con la entrega de premios de los concursos
Durante varios meses, el proyecto Rederas, del Centro Cultural Eureka, ha sembrado canciones, vídeos, ilustraciones y piezas escénicas en torno al papel de la mar y sus oficios, en especial este de las rederas desempeñado por mujeres.
Ese era el principal objetivo de esta iniciativa, conjunta con asociaciones de Gijón y Bilbao, la recuperación de la identidad marinera en una ciudad que muchas veces ha estado de espaldas a ella, y que también ha servido para estrechar lazos entre colectivos y creadores de estas tres ciudades bañadas por el Cantábrico.
El proyecto finaliza su singladura este viernes, con la entrega de premios de los dos últimos concursos de Música y Artes Escénicas, en la que se proyectarán y escucharán las canciones y las piezas escénicas que se han presentado, además habrá música y una pinchada. Todo ssmarrá en el centro Cultural Eureka, en la calle San Simón, este viernes a las ocho de la tarde,
Los trabajos presentados en las tres ciudades se pondrán en común en eventos simultáneos en Santander, Bilbao y Gijón, en los que se dará a conocer el nombre de los premiados en los concursos, que han sido cuatro en total (fotografía, ilustración, literatura-poesía y vídeo).
Rederas trata de estrechar lazos entre los vecinos de las tres urbes, con la colaboración de las asociaciones La Xata La Rifa (Gijón) y RMO (Bilbao), e intercambios entre ellas (la semana pasada misma hubo una fiesta asturiana en Eureka, y ha habido eventos cruzados en las tres ciudades).
Por eso, todas las propuestas giran en torno al mismo tema: el mar Cantábrico, la influencia que ha ejercido en los principales núcleos de población que viven al otro lado de su orilla y la importancia que ha tenido en la cultura no solo el propio mar sino el papel de figuras tan fundamentales como las rederas, que a lo largo del tiempo han desarrollado una tarea colaborativa y anónima.
Todas las propuestas girarán en torno al mismo tema: el mar Cantábrico, la influencia que ha ejercido en los principales núcleos de población que viven al otro lado de su orilla y la importancia que ha tenido en la cultura no solo el propio mar sino el papel de figuras tan fundamentales como las rederas, que a lo largo del tiempo han desarrollado una tarea colaborativa y anónima.
La labor de las rederas, recordada en el documental ‘Mujeres de la mar’ de Marta Solano (Burbuja Films) ha sido homenajeada recientemente en Santander con una calle propia, puesta en Castilla-Hermida por iniciativa de los movimientos feministas cántabros.
A esa recuperación de la identidad tradicional y marinera están contribuyendo otros entes en Santander, como el nuevo espacio cultural L’Asubiu o el proyecto Molnedo de El Cuarto de Atrás, entre otros.