El Andral incorpora prácticas medioambientales
Sobaos Andral, empresa del sector agroalimentario con sede en Selaya, ha apostado por integrar prácticas medioambientales en sus procesos, como la utilización de plásticos biodegradables o envases compostables.
Allí se elaboran sobaos ecológicos amparados además bajo la Indicación Geográfica Protegida (IGP), quesadas, que pronto tendrán también variedad ecológica- y bizcochos, combinando las recetas tradicionales con métodos más modernos de producción.
Además, este negocio de carácter familiar cuenta con su propia explotación lechera, con lo que todo el ciclo de elaboración se realiza bajo su supervisión, garantizando los máximos estándares de calidad.
Con la incorporación de este tipo de procesos ecológicos, el entorno natural de sus instalaciones ha experimentado numerosos beneficios, como la repoblación de especies florísticas y faunísticas o la regeneración de terrenos, como le explicaban recientemente sus responsables, los hermanos Sainz Santander, al consejero de Medio Rural, Jesús Oria, que visitaba las instalaciones.
El Andral es una empresa familiar que produce y distribuye estos productos tradicionales de los Valles Pasiegos. Su nombre proviene de la denominación del Barrio “El Andral”, ubicado en Selaya, donde se encuentran las instalaciones y casa familiar.
Aquí, según explican en su Web, vive y trabaja Alicia. “Alma Mater” de este proyecto empresarial familiar – emprendedor, junto con sus hijos Manuel, José Ángel, Jesús y Alejandro.
Es ella, con sus más de 25 años de experiencia en la elaboración de productos artesanales de la comarca Pasiega, la que conserva las recetas y formas tradicionales, que dan origen a la elaboración de sus tres productos: sobaos, quesadas y bizcochos.
Estas recetas tradicionales de Alicia se adaptan hoy a las nuevas exigencias tecnológicas (maquinaria, procesos, tec.) para que su elaboración pase todos los controles de Calidad.
En la visita, el consejero remarcaba el objetivo de su departamento de promover que las industrias del sector incorporen prácticas respetuosas con el medio ambiente y de preservación de los recursos naturales.
En este sentido, ha reiterado la preocupación de su departamento por cuestiones como la contaminación producida por el trasporte, por lo que promueve el concepto de ‘kilómetro cero’, que trata de impulsar el uso de productos agroalimentarios locales o de proximidad, o la huella de carbono para controlar la emisión de gases de efecto invernadero.
Además, ha mostrado el interés del actual Ejecutivo por implementar iniciativas para trasladar estas cuestiones a los colegios e institutos de Cantabria, de manera que los escolares sean conscientes de la situación ecológica y adquieran hábitos de consumo «sano, autóctono y respetuoso con el medio natural».