Las jugadoras de la selección sub-19 reciben el homenaje tras proclamarse campeonas de Europa. Foto: RFEF

Tiene el mismo nombre que la diosa griega de la paz, y ese es su objetivo para el vestuario en el que se encuentre. La unión hace la fuerza, tanto técnicos como jugadoras titularísimas o las que ayudan a completar el plantel. Y así es como la selección española sub-19 ha revalidado su título de campeona de Europa. Sólo Alemania había logrado tal gesta en los 20 años que lleva disputándose este campeonato.

España ha logrado su tercer título, y ha tenido en Del Castillo un revulsivo de lujo. Es la gran estrella del Racing Féminas y lo va a seguir siendo en la nueva temporada. No ha sido titular en ningún encuentro con España, pero sólo se ha quedado en un partido sin jugar en todo el campeonato.

En realidad, la trayectoria para poder levantar este trofeo es larga. 48 selecciones comenzaban en octubre de 2017, en un torneo con 12 grupos en el que pasaban los dos primeros de cada grupo y los cuatro mejores terceros a la segunda fase. La selección española fue muy superior a Albania (las anfitrionas, cada grupo se jugaba en una localización diferente), Azerbayán y Ucrania.

La segunda fase se disputó en abril con los 28 combinados nacionales que habían superado la primera. Se formaron siete grupos de cuatro, cada uno con un anfitrión, pero esta vez la exigencia era más alta, pues había que ser campeonas de grupo para acceder a la fase final. Y España volvió a no sufrir frente a Turquía, Irlanda (anfitriona en este caso) y Austria. Y en esta fase ya estaba Del Castillo, asumiendo el papel que ha tenido ahora en Suiza: nunca titular, pero siendo un arma a utilizar en las segundas partes.

Las siete campeonas se juntaron a Suiza, clasificada de antemano por ser la organizadora del torneo final, en una competición con dos grupos de cuatro equipos, en que los dos primeros de cada uno se clasificaban para semifinales. Y aquí llegó la hora de sufrir. Primer partido, derrota 0-2 ante Noruega, lo que obligaba a afrontar los dos siguientes partidos sin margen de error. Victoria 0-2 ante Suiza y 1-2 ante Francia (gol de Del Castillo incluido) para acceder a la penúltima ronda como segundas de grupo.

En semis las rivales eran las danesas, un partido muy complicado, pero enseñando que eran las españolas quienes defendían título en tierras helvéticas. El papel de Del Castillo fue marcado por el seleccionador Jorge Vilda, que es el absoluto y que ha querido estar con las sub-19 en el torneo. Al descanso, 0-0, y la novedad para la segunda parte fue que la jugadora santanderina sustituía a Alejandra Serrano. Del Castillo es, casi siempre, el primer cambio del equipo.

La victoria acabó cayendo del lado español gracias a un gol de Teresa Abelleira mediado el segundo tiempo. Un 1-0 sufrido, pero que daba la opción de mantenerse como las mejores del continente si se superaba a Alemania, el último rival al que debían enfrentarse.

Las alemanas son las más laureadas de este torneo. Campeonas seis veces y han llegado a nueve finales en 21 torneos. Sin embargo, llevan desde 2011 sin ganarlo, y no habían vuelto a una final desde entonces. Y este es el tramo en el que España mejor ha competido. Ha jugado seis de las últimas siete finales, y lleva ya cinco consecutivas. Perdió las tres primeras, pero ha ganado las dos últimas.

De nuevo un 1-0 para conseguir el triunfo, y de nuevo con la racinguista siendo el primer revulsivo que usaba Vilda. Salió, con el marcador en tablas, a falta de media hora para la conclusión del partido. Esta vez fue María Llompart quien marcó el gol decisivo, cerca de la recta final, en el minuto 80, de falta.

Después de eso quedaba levantar el trofeo y celebrar que han vuelto a ser las mejores de Europa. Y el reconocimiento, vivido hoy con la recepción por parte del ministro de Cultura y Deporte, José Guirao, la secretaria de Estado para el Deporte, María José Rienda, o el presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, además de poder hacerse una foto con el nuevo seleccionador absoluto masculino, Luis Enrique, en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas.

LOS PLANES DE LA JUGADORA

Del Castillo aún no ha cumplido los 18 años, pero ya se ve una figura en ciernes. El fútbol femenino en Cantabria sólo lleva dados unos poquitos pasos, y por eso es difícil saber, por el momento, qué nivel alcanzará. Las perspectivas son buenas porque la gran mayoría de jugadoras que destacan son tremendamente jóvenes, incluso por debajo de los 20 años.

La jugadora cántabra tiene los pies en el suelo, y sabe que su educación también tiene muchísima importancia. Por eso, al estar ante el último año de instituto, ha elegido seguir en Santander y no dejarse tentar por ofertas de otros equipos.

El próximo verano las competiciones senior de fútbol femenino en España van a cambiar. En lugar de haber una Primera División de 16 equipos y una Segunda división de 112, repartidos en siete grupos, se va a crear una Primera División B con dos grupos de 16, de manera que haya algo intermedio entre algo tan exclusivo y algo tan numeroso como ahora.

El objetivo de Del Castillo es poner al Racing en esa Primera División B y terminar sus estudios. A partir de ahí, lo que quiera estudiar después puede determinar su futuro deportivo, que previsiblemente seguirá pasando por el rojo de España.