Los responsables de Escenario Santander vienen desconectando de forma “bastante habitual” (en palabras del Ayuntamiento de Santander) los sistemas antiincendios porque interfieren con el normal desarrollo de los conciertos.

Según explican sus gestores, lo que sucede es que durante los conciertos se venían produciendo lo que se conoce como “falsos disparos” o falsas alarmas, es decir, se activa por error o fallos de sensibilidad sin que responda a uno de los supuestos por los que se instalan estos dispositivos.

La empresa, una de las dos que componen la organización de los conciertos de La Campa en Semana Grande (entre ellos la actuación de Guetta que no llegó a producirse sin que se vaya a devolver el dinero) alega que, en todo caso, las alarmas se volvían a activar al finalizar los conciertos.

Los gestores de Escenario Santander indican al Ayuntamiento que están trabajando en la modificación del sistema de detección de incendios con otro que sea «compatible» con el uso habitual de la sala. 

Así lo afirman los gestores (una de las dos empresas que organizaron los conciertos de La Campa, incluida la frustrada actuación del DJ David Guetta) de este recinto municipal en sus alegaciones a la penalización de 500 euros que se les ha impuesto desde el Ayuntamiento de Santander, consultadas por EL FARADIO.

La desconexión se ha hecho de forma “muy habitual”, según concluye el Ayuntamiento, que eleva el tono en su sanción al advertir de que un nuevo incumplimiento en lo relacionado con las alarmas supondría acabar con el contrato.

Y es un asunto, el de la desconexión de las alarmas, que en otros casos, como el incendio en parte del MAS (el museo municipal de Santander) supuso la rescisión del contrato con la empresa responsable.

Todo esto ha trascendido a raíz de una visita que hizo a las instalaciones, en el Parque de Las Llamas, el jefe municipal del Servicio de Extinción de Incendios, a quien a su vez se lo había solicitado el responsable del Servicio Municipal de Prevención de Riesgos Laborales.

Esa inspección detectó varias irregularidades, relacionadas con las alarmas y con el propio uso del edificio.

Además de por la desconexión de las alarmas, la penalización también se impone por haber realizado, el pasado 15 de marzo, un evento de catering dentro de la sala de conciertos.

Para ello, se describe en el texto de la sanción, se habilitó una sala de preparación de alimentos, con uso de gas, en los vestíbulos que comunican con el espacio de la Banda Municipal.

Hay una tercera causa, un genérico “uso inadecuado” de estas instalaciones municipales dedicadas fundamentalmente a los conciertos, locales de ensayo o estudios de grabación.

Sobre este evento de catering, los responsables de la gestión del espacio replican que fue “una cuestión excepcional”, y en cuanto al genérico “uso inadecuado” de las instalaciones (no concretado ni en la sanción ni en la respuesta), se defiende que “en los seis años que realizan la gestión de este servicio no se produjeron incidentes de seguridad”.

Las alegaciones de la empresa son rechazadas por el Ayuntamiento, que concluye tras escucharle que se trata de un incumplimiento de carácter leve del contrato, penados por multas de entre 100 y 500 euros, al no afectar a las condiciones “esenciales” ni suponer un incumplimiento de las condiciones económicas.

El Ayuntamiento se ha inclinado por la pena más alta (la más alta de las leves) contemplada en el pliego, los 500 euros, al afectar uno de ellos a la seguridad de las personas, mientras la empresa solicitó que los problemas se saldaran con una penalización de 100 euros.

Tal y como se explica en la resolución, la adjudicación de Escenario Santander se hizo en mayo de 2016 por un importe de 9.100 euros anuales durante un período de cuatro años.

En cualquier caso, le recuerda que “está terminantemente prohibido tener desactivados los sistemas de alarma anti-incendios de edificio, bajo cualquier circunstancia” y de que “sólo está autorizado a realizar en el edificio aquellas actividades expresamente previstas en los Pliegos de condiciones que regulan el contrato”.

Y le advierte de que “cualquier nuevo incumplimiento en materia de medidas de seguridad, y especialmente en lo relativo a la perfecta operatividad de los sistemas de alarmas anti-incendios, serán causa de resolución del contrato.”

Además de la penalización, la concejala tránsfuga ex de Ciudadanos Cora Vielva ha venido denunciado reiteradamente la falta de planes de seguridad en Escenario Santander.

En lo relacionado con la actuación cancelada de David Guetta, incluida en la programación de la Semana Grande tras una adjudicación del Ayuntamiento a dos empresas, una de ellas la que gestiona Escenario, hay afectados que ya están organizándose para presentar una demanda colectiva por la no devolución de los gastos de las entradas, que La Campa (los organizadores de los conciertos) condicionan a que Guetta devuelva todo el dinero que ellos a su vez le reclaman. (Guetta ha devuelto parte de su caché y La Campa le reclama una serie de gastos extra, como los costes de producción).