El PP de Santander enarbola ya el discurso del miedo ante su desgaste por el MetroTUS
La crisis generada por la implantación del MetroTus, con críticas masivas que han llevado a su anulación, ha hecho que el equipo de Gobierno del PP que lo implantó visibilice con palabras la posibilidad de un cambio de gobierno en la Casona.
La marcha atrás anunciada por la alcaldesa, Gema Igual, no ha supuesto el fin del debate, ya que los colectivos que se han opuesto, con éxito, a este modelo, reclaman una revisión del modelo de transporte y movilidad de la ciudad, tal y como venían haciendo.
Y en el plano político, al próximo Pleno –el miércoles de la semana que viene, en el que también se hablará del estado de la limpieza en las calles y de la no devolución del dinero de las entradas por la frustrada actuación de David Guetta en los conciertos de las fiestas de Santander– llega una petición por parte de la oposición (PSOE, PRC, IU y Santander Sí Puede) de reprobación tanto de la alcaldesa como del concejal de Movilidad Sostenible, José Ignacio Quirós.
Lo que planteaban los partidos de la oposición es que la marcha atrás en el proyecto tras diez meses desde su introducción (será en noviembre cuando se haga efectiva) no se cerrase en falso sin asunción de responsabilidades tras una inversión de 7 millones de euros por los buses y la plataforma que no se hubiera adoptado si no fuera por esta infraestructura.
Para el concejal de Movilidad Sostenible, José Ignacio Quirós, esto supone que el único interés de la oposición en este tema no era recuperar las líneas a su origen, tal y como pedían los usuarios (la Plataforma reclamaba volver al modelo anterior e introducir mejorar en el sistema, pero a partir del modelo anterior), sino “utilizarlo políticamente”.
Y en ese argumentario de respuesta ya se cuela la acusación de que la oposición quiere «llegar a gobernar Santander a cualquier precio”.
El PP, ante las críticas políticas de la oposición a su gestión en un tema que ha sido amplíamente criticado por los usuarios, llega a hablar de un pacto entre regionalistas y socialistas con IU y Podemos (siendo estrictos, Santander Sí Puede es un partido que no guarda relación con Podemos, que tiene estructura propia en la capital, aunque no representación municipal, en la que se encuentran antiguos miembros críticos de Podemos( que se traduciría en un «gobierno de radicales”.
Para el PP, Casares y Fuentes-Pila (PSOE y PRC) “veían en el mantenimiento del Metro TUS sus únicas opciones para hacer un cuatripartito ingobernable en Santander”, por lo que el hecho de que el PP finalmente haya tomado la decisión de «escuchar a los vecinos» les ha generado » “enorme rabia y frustración”.
Desde el equipo de Gobierno hacen énfasis en la parte que ven más positiva del proceso (y que permanecerá, ya que la marcha atrás es en las líneas y en los criticados transbordos): la línea central, la priorización semafórica o el carril rápido, que ha dotado de mayor agilidad en el tráfico para todos los autobuses (sean o no municipales), taxistas, motos, o servicios de emergencia, así como las marquesinas inteligentes (?) y tótems, y la puesta en servicio de los autobuses articulados de gran capacidad, (por su refuerzo de la línea central en puntos de gran afluencia como las playas –rutas que este verano también han sido criticadas por su saturación y retrasos).
Ñumo
De la Serna les ha machacado. Todo el castigo que sufre esta alcaldesa, partícipe en las decisiones de De la Serna en todos los años anteriores pero no responsable última, que es él, viene de la herencia pésima de su antecesor.
El Metro Tus es del anterior alcalde en toda su magnitud. El desastre de la abandonada sende de la costa en el norte, igual. El desastre de las nuevas cocheras del Tus, lo mismo. El fallecimiento de la Smart City y su derroche anterior, lo mismo. El abandono de tantas infraestructuras realizadas sin presupuesto de mantenimiento, lo mismo. Los espigones de la Magdalena, son de De la Serna. Y decenas de cosas más.
Lo curioso es que el protagonista se pasea por la ciudad, da ruedas de prensa lacrimógenas y recibe premios como si nada.
De su etapa de Ministro pues en fin. En dos años da para poco o nada. Y nada, que se sepa, se ha visto, se ha hecho, se ha ejecutado en la ciudad y en la Comunidad. O ha hecho realmente algo?