Las marquesinas visibilizan la violencia de género de la mano de la artista Heather Leier
La artista Heather Leier intervendrá a lo largo de esta semana en varias marquesinas de autobús de la ciudad para dar visibilidad a través de su obra al drama de la violencia de género.
La propuesta es una de las actividades incluidas dentro del programa de la Conferencia Internacional Multidisciplinar de Gráfica Impact 10, que se celebra hasta el domingo en la ciudad y reúne a más de 400 artistas, investigadores y profesores de 40 países.
Una de esas creadoras es la canadiense Heather Leier, que está desarrollando una serie de intervenciones artísticas en ocho marquesinas de autobús distribuidas en el eje comprendido entre Correos y el centro cultural Doctor Madrazo que podrán verse hasta el sábado.
Algunas de ellas asoman ya para llamar la atención de los viandantes en paradas como las situadas en Puertochico o Casimiro Sainz, y el resto se irán ejecutando en los próximos días.
En ellas, la artista muestra a mujeres semiocultas, escondidas o acurrucadas, para reflejar el temor de las víctimas de la violencia de género y su búsqueda de refugio o protección para evitar a su agresor.
Heather Leier es artista y profesora asistente de medios impresos en la Universidad de Calgary (Alberta, Canadá).
Su obra ha sido expuesta en numerosas muestras internacionales, incluida la Exhibición Bienal Internacional de Impresión: ROC’ en el Museo Nacional de Bellas Artes de Taiwán y la Bienal Internacional de Impresión Guanlan en Guanlan (China) en 2015. También ha realizado exposiciones individuales en diversas galerías y espacios de arte.
Su investigación artística se centra en construcciones sociales de etapas de la vida, implementaciones contemporáneas de medios impresos, instalación y prácticas de creación de arte social.
Los juzgados de violencia sobre la mujer de Cantabria recibieron durante el pasado año 2017 un total de 1.908 denuncias, en las que figuraban como víctimas 1.717 mujeres, lo que representa un incremento importante tanto de mujeres víctimas como de denuncias en los juzgados.
No es la única intervención reciente para visibilizar en el espacio público la violencia de género: constan desde las performance que en nochevieja se hicieron en Torrelavega (que acogió también, ca cargo de Octubre, otra sobre el machismo) o las representaciones teatrales que hizo el equipo de El Principal Teatro en Santander, así como el paseo de Torrelavega que recuerda a las fallecidas (y que ha sido objeto de ataques vandálicos). Más allá de los espacios públicos propiamente dichos, este verano en Comillas los bares exhibían servilletas con mensajes contra la violencia de género, y en Santander la asociación MUJOCA cuenta con un local, cedido por el Ayuntamiento, para su punto de información sobre relaciones tóxicas.
El espacio público se concibe así como una herramienta didáctica y sensibilizadora: como un punto de encuentro es como lo concibe la iniciativa Desvelarte, que arranca este fin de semana y que cumple este 2018 una década de intervenciones artísticas y reflexivas,