La Intervención General de Cantabria, el organismo de la Administración que fiscaliza el adecuado cumplimiento de las normas por parte del propio Ejecutivo, cuestiona que la Fundación Comillas, que gestiona el proyecto de universidad del español en la villa cántabra, pueda continuar con su actividad en un futuro.

Visita al Seminario Mayor de Comillas: Revilla, Gorostiaga, Agudo, Marcano, Salvador Blanco y Enrique Ambrosio (Liberbank).

Lo hace en un informe sobre la gestión de la Fundación que acaba con conclusión desfavorable (no es el único informe desfavorable sobre la fundación, ya en 2017 fue la única sociedad pública con informe desfavorable).

En el documento, al que ha tenido acceso EL FARADIO, se cuestiona que los datos ofrecidos por la Fundación puedan ofrecer una imagen fiel de su estado conforme a la forma habitual de hacerlo.

Y se revela que en febrero de 2018 se aprobó la reestructuración tanto de la Fundación como de la SAICC, la responsable de los activos inmobiliarios (si bien ya en 2013 hubo un mandato de que se produjera una reestructuración).

Ese proceso implicaba trasladar sus participaciones a alguna consejería del Gobierno de Cantabria, por determinar, pero ni se concretó el departamento que la asumiría ni el coste económico del proceso. Tampoco se conoce si finalmente se ha concretado esta medida siete meses después.

En el informe se muestran “dudas razonables” sobre que el proyecto pueda conseguir nuevos ingresos vía ampliación de los cursos que se propone la entidad. En 2017, los distintos cursos previstos supusieron ingresos por valor de 348.241 euros (se habían previsto 551.074 euros)

De hecho, la falta de ingresos propios por actividad y el descenso en las aportaciones de los patronos llevó al Gobierno a subir un 26% su aportación (1,1 millones), lo que permitió mejorar las cifras en términos contables. El informe también menciona la pérdida del proyecto Colegios del Mundo.

A fecha 2017, su patrimonio es negativo, con pérdidas por valor de 813.000 euros, y el balance económico arrojó pérdidas por valor de 7,5 millones de euros. También presenta un fondo de maniobra negativo de 6,9 millones de euros. Empresas del propio grupo que forma la estructura del Campus Comillas le deben 5,3 millones de euros por conceptos como el pago de los alquileres de edificios.

De modo que, en la compleja estructura diseñada en su día por el Gobierno PRC-SPOE, la Fundación le debe dinero a la SAICC, no consigue ingresos propios suficientes por actividad, y es el principal modo de financiar una de las empresas públicas asociadas a ella, lo que teniendo en cuenta las deudas y la falta de ingresos suficientes hace que Intervención tenga dudas sobre si viabilidad.

Ya en un anterior informe afloraron varias irregularidades en su gestión:

-Como la compleja estructura de pagos por alquileres que Intervención consideraba que en realidad suponían una forma encubierta de financiar su actividad, pese a no tener cobertura jurídica

-O los incumplimientos legales en los contratos de sus directivos o las deudas mantenidas con otro entes de la propia Administración