Daniel Ahumada, exresponsable anticorrupción de Podemos en Cantabria || Foto: Podemos

El responsable anticorrupción del Consejo Ciudadano de Podemos en Cantabria, Daniel Ahumada, ha presentado este jueves su dimisión tras la marcha del diputado José Ramón Blanco, que acusado de acoso laboral también ha renunciado a presentarse a las primarias para las elecciones del próximo año 2019.

La Secretaría Anticorrupción, que recuperó Ahumada en abril de este año tras la victoria en las primarias de la actual secretaria general, Rosana Alonso, ha sido una figura muy importante en la labor de oposición al Gobierno de Podemos durante la legislatura, con episodios como el marcaje al exconsejero delegado de SODERCAN, Salvador Blanco, o el responsable del área internacional de la misma empresa pública, que terminó dimitiendo.

No es la primera vez que Ahumada renuncia a su responsabilidad en el partido, puesto que cuando se marchó el anterior secretario general, Julio Revuelta, en junio de 2017, fue uno de los once consejeros que abandonó la disciplina del partido morado.

Todo en una legislatura marcada por la convulsión interna, puesto que Revuelta había sustituido al primer secretario general, que fue el propio José Ramón Blanco que ha terminando abandonando por el escándalo de las denuncias por acoso laboral.

«SI NO PUEDO ESTAR SEGURO DE QUE NO ME ESTÁN GRABANDO EN MI PARTIDO…»

En un comunicado al que ha tenido acceso EL FARADIO, Ahumada  liga su dimisión a la de Blanco, y reivindica que tanto este como Bolado «llevaban toda la carga de trabajo parlamentaria relacionada con este área».

Por tanto, considera que la continuidad de «gran parte del trabajo» que venía haciendo en este campo se hace «imposible».

Ahumada muestra su agradecimiento a todas las personas que han colaborado con él este tiempo,  así como a Blanco y Bolado, entre otras personas, así como a las fuentes que les han permitido tener acceso a información comprometida, por el «riesgo» asumido por ellos al hacerlo, y que, según ha revelado, le han trasladado estos días que no están dispuestos a seguir colaborando con el nuevo escenario en la formación morada.

«Si yo no puedo estar seguro de que no se me está grabando desde mi propio partido, menos seguridad pueden sentir ellos – por las fuentes anónimas- de que su identidad, información y conversaciones vayan a estar protegidas«, advierte. Y ha incidido en que le consta que estas personas están tratando de ser “identificadas por el Gobierno”.

DESENTRAÑAR «LA CANTABRIA SUBTERRÁNEA»

Ahumada ha destacado que durante el tiempo que ha trabajado en el partido han tratado de investigar y señalar «las corrupciones, las redes clientelares, la falta de independencia de la Justicia y de las cúpulas policiales en Cantabria y la deriva continuada de recursos públicos hacia intereses empresariales o partidistas».

Así, su objetivo ha sido siempre desentrañar la “Cantabria subterránea” para conseguir «mantener la honradez y la ética por la que entienden que debe regirse la función pública» para hacer aflorar así las irregularidades «que permanecían ocultas» en la gestión pública, haciendo que llegarán al Parlamento y a la agenda pública.

De su trabajo, destaca la creación de la Comisión de Investigación sobre el Servicio Cántabro de Salud, recordando que en su momento lograron aprobar una sobre Valdecilla, una iniciativa, que, no obstante, se «quedó en un cajón por razones que desde mi responsabilidad de área desconozco».

Finalmente, ha ensalzado a «la gente capaz, buena e ilusionante» que ha conocido gracias a Podemos, aunque «gran parte de ellos ya se han ido y desgraciadamente para no volver», por enseñarle «el horizonte que pudo ser».  «Desgraciadamente, parafraseando a Sobaler, la alegría en Podemos se da tan tarde como las valentías en un cobarde», remachaba.