Amnistía Internacional muestra los obstáculos en las denuncias de las agresiones sexuales
En la semana previa al Día Internacional contra la Violencia de Género, Amnistía Internacional ha salido a la calle este miércoles para poner en evidencia ante los ciudadanos la carrera de obstáculos a las que se enfrentan las víctimas de agresiones sexuales cuando intentan denunciar.
Para ello, han puesto vallas a modo de obstáculos en el centro de Santander, en la calle Burgos, mientras recogían firmas, que también pueden hacerse a través de su Web.
Recordando el caso de Sara (nombre ficticio), han llamado la atención sobre el «camino lleno de piedras» que se encuentran las mujeres tras sufrir una violación, en un proceso en el que «los prejuicios, los estereotipos y la violencia institucional se ceban con ellas» para acabar tratándolas «como culpables».
Así, se critican cuestiones como los interrogatorios policiales en los que se alude a la ropa de la víctima, la falta de asistencia médica o el trato en los juzgados.
Según datos de la Macroencuesta de Violencia contra la Mujer 2015, el 7’2% de las niñas y mujeres han sufrido violencia sexual en algún momento de su vida, lo que equivale a más de 1,4 millones de niñas y mujeres.
Además, el 12,5% de las mujeres de 16 y más años que viven en España han sufrido violencia física o sexual a lo largo de su vida. Y el 13% de las mujeres han tenido miedo de su pareja en algún momento. Si se extrapola el porcentaje a la población femenina de esa edad estaríamos hablando de más de 2,5 millones de mujeres. Sólo en 2015, el 2,7% de las mujeres ha sufrido violencia machista, física o sexual y 9,2% ha padecido violencia psicológica, control, humillaciones, acoso, amenazas.
El miedo al proceso judicial, a no ser creídas, a las represalias, a perder a sus hijos e hijas, a la vergüenza, a no darle importancia al maltrato recibido, o el desconocimiento del proceso judicial lleva a que el 67’8% de las mujeres que reconocen en la Macroencuesta de 2015 haber sufrido casos de violencia no vayan a los juzgados.
«No consiento que no se crea a las mujeres violadas, que su palabra sea cuestionada, que sean ellas las juzgadas y no los violadores. No consiento ni una sola agresión más, ni una sola humillación más, ni una sola piedra más en el camino de las mujeres que sufren violencia sexual. No consiento que se crea que la violencia sexual es solo una cosa de mujeres porque nos afecta a todos y a todas: seres queridos, familias, parejas, hijos, hijas, amigos…», se reivindica en el manifiesto de esta campaña de Amnistía Internacional.
EL LENGUAJE DE LAS ACCIONES CALLEJERAS
Las performances de este estilo o representaciones teatrales callejeras se están convirtiendo en una potente herramienta de denuncia: en los últimos años las hemos visto denunciando la situación de guerra de la que vienen los refugiados o situaciones de machismo, a cargo de la asociación Octubre de Torrelavega, además de otras sobre las mujeres asesinadas por violencia de género o representaciones teatrales de escenas de violencia contra las mujeres a cargo del equipo de El Principal.
Y cada nochevieja las activistas feministas sorprenden con una acción similar, en los últimos años se han celebrado en el centro de Santander o Torrelavega, donde las mujeres se han tirado sobre el suelo simulando estar muertas, con carteles con nombres de víctimas reales de asesinatos machistas.
En Torrelavega, las víctimas de la violencia machista son recordadas con siluetas de color morado instaladas en los árboles de la Avenida de España, a iniciativa nace del Consejo de la Mujer de Torrelavega,
MUJOCA ABORDA LAS AGRESIONES MACHISTAS EN LA VIDA COTIDIANA
La semana que viene será el 25N, el Día Internacional contra la Violencia de Género. Ese día, domingo, habrá una manifestación reivindicativa, que saldrá a las 12 desde la Plaza de Numancia,
Pero ya estos días hay citas en torno a la denuncia de las desigualdades, la violencia y el maltrato: este sábado 17 de noviembre a las diez de la mañana en la EOTL de Cantabria tendrá lugar una nueva jornada de la Escuela Feminista de MUJOCA con el taller impartido por Ade sobre agresiones machistas de la vida cotidiana.
LAS GILDAS LOGRAN LA PROYECCIÓN DEL DOCUMENTAL
Y el siguiente martes, 27 de noviembre, a las 20.00 horas, dos días después de la manifestación, Las Gildas han organizado la proyección del documental “Tódalas mulleres que coñezo” en el cine Los Ángeles de Santander. La proyección ha sido posible gracias a una exitosa y rápida campaña: Las Gildas necesitaban 80 entradas para garantizar un mínimo suficiente para poder exhibirlo y lo consiguieron en horas, demostrando así su implantación en la comunidad. Las entradas pueden reservarse aquí.
Es un documental obra de la realizadora y artista visual Xiana do Teixeiro, en el que pretende establecer una “puesta en palabras” para pensar el desequilibrio social entre hombre y mujer en nuestro país.
A través de conversaciones cruciales en tres escenarios enlazados y significativos, se analizará cómo se ha llevado a cabo un cambio de conducta en las mujeres a nivel nacional, con el altavoz sensacionalista de los medios de comunicación, a partir del punto de inflexión del caso Alcàsser.
En tres conversaciones reveladoras con amigas, colaboradoras y estudiantes de secundaria, la directora busca articular un discurso sobre el miedo que no fomente el miedo, un discurso sobre la violencia que no resulte violento. “Hay que hablar de todo esto”, defiende la autora. “Necesitamos hablar con naturalidad de lo que nos duele, incomoda o agrede de manera específica, de los espacios que no ocupamos, de lo que sentimos que nos limita. Tenemos que contarlo y contarnos, vernos y oírnos en otras historias, diferentes pero comunes. Si lo ponemos en palabras lo empezamos a diluir”.
El documental ha sido premiado en el Festival de Málaga de este año, en la Sección Oficial Largometraje Documental y se ha estrenado en varios festivales de diferentes modalidades. Su directora, Xiana do Teixeiro, es co-fundadora de la productora Walkie Talkie Films y está especializada en cine documental de autor y vídeo experimental. En todas sus obras trabaja sobre el relato íntimo, la identidad y la construcción del género, y también hacia una descentralización de la idea de naturaleza.