Las trabajadoras del servicio de Auxiliares de Dependencia de Santander se concentrarán frente al Parlamento de Cantabria este lunes, 17 de diciembre, a las 15.00 horas.

El trabajo en la dependencia es uno de los más precarios. (Foto: Carlos Atienza)

Así lo ha comunicado Rosa Martinez delegada independiente y presidenta del Comité de Empresa de empresa UTE SAD Cantabria, que denuncia la “falta de rigor del Gobierno de Cantabria en el Proceso Licitador del Servicio de Atención a la Dependencia de Cantabria” que ha “ralentizado y bloqueado” la licitación “hasta nuevo aviso”.

Al parecer, la subrogación estaba prevista para el 15 y 16 de diciembre tras la publicación del ERE de extinción 45/2016, que despidió a 14 trabajadoras y dejó la empresa en precario. Pero esta se ha visto aplazada, según denuncian por la “falta de implicación” de la consejera y vicepresidenta del Gobierno, Eva Diaz Tezanos.

Para Martínez esto es más grave aún al tener en cuenta que el Gobierno sabe “que la intención de la empresa es mantener las condiciones del acuerdo del ERE, que nos roban derechos”.
Pese a todo, el Comité de Empresa mantiene que un servicio tan esencial como es el servicio de atención a la dependencia, “debería de ser gestionado por la propia administración y no por empresas multiservicios que denostan el servicio”.

Otra cuestión que denuncian es que, desde la UTE SAD CANTABRIA, “renunciaron a prorrogar y ahora vuelven a licitar con otro nombre, al objeto de seguir creando inseguridad, precariedad con contrataciones a mujeres, por menos horas que las que vienen trabajando, en ocasiones sin remunerar, favoreciendo la economía sumergida, aun sin estas mujeres quererlo”.

Las afectadas son las trabajadoras del lote 1 de Santander, cuyas delegadas representantes denuncian que “siguen encadenando contratos, renovaciones e irregularidades” sin que “hasta la fecha se tomen medidas por parte de los organismos competentes”.

El 98% de las plantillas las conforman mujeres y la precariedad es el día a día en estos contratos, donde los sueldos son mínimos y no se suelen cubrir, ni siquiera, gastos de desplazamiento. Estas trabajadoras se encargan de la asistencia técnica y personal de enfermos dependientes de diferentes grados.