Juan Manuel Moreno, diputado por Cantabria antes que ‘Fraile’
El nuevo presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno, de quien se destaca que ha hecho historia por acabar con décadas de gobiernos socialistas allí, pero también por haberlo hecho apoyándose en partidos de ultraderecha que cuestionan las leyes de apoyo a las víctimas de violencia de género y que lanzan mensajes contra la inmigración, tiene un apartado cántabro en su biografía.
En la legislatura 2000-2004, Moreno fue diputado en el Congreso en representación de nuestra comunidad autónoma pese a la ausencia de vínculos con ella. De ahí viene una relación con el grupo de empresas de Fraile y Blanco, inicialmente del sector de la publicidad, que le ha acompañado en sus sucesivas responsabilidades institucionales.
Este grupo empresarial del sector de la publicidad e Internet, a cuyo frente está Juan José Fraile, fue uno de los principales adjudicatarios de campañas y proyectos con el área socialista del los Gobiernos de Cantabria entre 2003 y 2011 (fundamentalmente en la primera de esas etapas, la era de los perlizadores y el programa Cantabria en Red), todo a través de una red de al menos nueve sociedades interrelacionadas entre sí y valiéndose del método de los contratos fraccionados por importes menores que permitían la adjudicación directa.
Pese a esta estrecha relación con el área socialista, lo cierto es que cuando la empresa nació lo hizo con cierta vinculación al Partido Popular: su primera sede estuvo en la localidad de El Astillero cuando el alcalde era Ignacio Diego, expresidente de Cantabria (y cuñado de Leovigildo Castañeda, uno de los hombres de confianza del grupo).
A Cantabria fue ‘destinado’ en el año 2000 el andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla, si bien tampoco es una plaza que visitara mucho debido a que su representatividad era en el Congreso de los Diputados, en Madrid, donde fue elegido diputado nacional por la comunidad en la séptima legislatura (2000-2004).
Durante esa legislatura en la que se conocieron ambas partes, Moreno fue, entre otras responsabilidades, portavoz adjunto de la Comisión de Ciencia y Tecnología, y ponente (bajo los Gobiernos de Aznar) de leyes como la de Telecomunicaciones, Firma Electrónica o de la Sociedad de la Información y el Comercio Electrónico. Nuevas tecnologías y políticas de juventud centraron sus intervenciones como diputado.
De esa época data un proyecto que relaciona de una tacada al Gobierno central, a Moreno, a El Astillero y a Fraile y Blanco: Industrial Zone, con el objetivo de favorecer la implantación de las nuevas tecnologías entre las empresas industriales del municipio.
Esta iniciativa contó con el apoyo del Ministerio de Ciencia y Tecnología, y dentro de ellas, se desarrollaron unas jornadas organizadas (febrero de 2002) en El Astillero por Fraile y Blanco, que fueron abiertas por el entonces presidente José Joaquín Martínez Sieso, el alcalde Ignacio Diego, y el diputado Juan Manuel Moreno, quien ensalzó al municipio como un “laboratorio de la Sociedad de la Información” gracias a este y otros proyectos.
De esa época es también el programa del Ministerio ‘Ciudades Digitales’, del que El Astillero fue la primera beneficiaria en Cantabria, en el que se incluía Industrial Zone, junto a proyectos Web y de formación que asumiría Fraile y Blanco, con un importe estimado cercano al millón de euros.
Entre las responsabilidades de Juan Manuel Moreno también han figurado históricamente distintos cargos ya en el ámbito del Partido: desde presidente de Nuevas Generaciones hasta secretario de Nuevas Tecnologías de la formación.
En esa época, Fraile y Blanco accedió a trabajos para la dirección nacional del Partido, como la Web para las elecciones generales de 2004, las que perdió (tras ser designado sucesor de Aznar) Mariano Rajoy frente al socialista José Luis Rodríguez Zapatero.
LA ETAPA SOCIALISTA: LOS CAMINOS SE BIFURCAN
Previamente al cambio de Gobierno en España se produjo también un relevo en el Gobierno de Cantabria: los regionalistas cambiaron su alianza con el PP por una con el PSOE que convirtió al secretario general del PRC Miguel Ángel Revilla en presidente de la comunidad autónoma, con la líder socialista Dolores Gorostiaga como vicepresidenta del Ejecutivo regional.
Fue un período de dos legislaturas (2003-2011) en el que la conexión Moreno-Blanco dejó de ser tan visible, si bien en ese tiempo fue cuando la empresa le diseñó su blog, hoy no operativo.
Pese a sus lazos iniciales con el PP, Fraile y Blanco logró importantes adjudicaciones con la parte socialista de ese Gobierno, en una etapa en la que coincidió con su traslado a la fastuosa sede del Río de la Pila, en un antiguo edificio de Telefónica en la calle La Milagrosa.
El Plan de Gobernanza, campañas de formación en los telecentros, repartos de dispositivos de ahorro de agua, la tarjeta Comercio Cantabria o la cuestionada campaña publicitaria del Plan Eólico (en la que los empresarios aspirantes denunciaron la filtración de sus datos y presiones para participar a cambio de ser adjudicatarios de los proyectos) fueron algunos de los proyectos adjudicados desde el Ejecutivo (y a los que habría que sumar sus trabajos directos para el PSOE en campaña electoral).
Sólo en la segunda legislatura, en la que la actividad bajó, el volumen de adjudicaciones ascendió a un mínimo de 11,6 millones de euros, distribuidos en al menos nueve sociedades del grupo relacionadas entre sí y con contratos fraccionados que permitían sortear el concurso público.
Cuando comenzaron a exponerse estos datos en el abruptamente desaparecido programa de radio Buenos Días Cantabria –producido por la empresa que realiza EL FARADIO y EL FARADIO DE LA MAÑANA en ARCO FM –103-2–, el expresidente de Cantabria y exsecretario general del PSOE, Jaime Blanco, afirmó que detrás de estas prácticas se escondía la financiación irregular del Partido Socialista en Cantabria. La abogada Pilar de la Hera, especializada en el seguimiento a temas de corrupción, aseguró, lacónicamente, que “es lo que parece”.
VUELVEN A CRUZARSE CON EL PP EN EL GOBIERNO CENTRAL
En los últimos años del anterior Gobierno Fraile y Blanco extendió su actividad a otras áreas, más relacionadas con el mundo de la empresa, consiguiendo clientes de peso como el Banco Santander o Telefónica, y también a otras ciudades, como Madrid o Palma de Mallorca, en un palacete donde se desarrollan los encuentros formativos de Talentya, en colaboración con la Fundación Telefónica.
Fraile y Blanco tiene una sede en Madrid, un palacete en Príncipe de Vergara, zona Velázquez, que combina el domicilio personal y la sede de la empresa, más reducida en los últimos años.
Es en Madrid donde los caminos de ambos vuelven a cruzarse, en una etapa en la que, dentro de los gobiernos de Mariano Rajoy, Juan Manuel Moreno ocupó la Secretaría de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, dentro del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
EL DESARROLLO DE APLICACIONES
Para esos departamentos, Fraile y Blanco ha desarrollado (dentro de la expansión del grupo hacia el diseño de aplicaciones móviles) ‘apps’ para las áreas de Violencia de Género, el Plan Nacional de Drogas y también para la Estrategia de Emprendimiento, que depende de esa área.
La aplicación de Violencia de Género, llamada Libres, ha sido ampliamente difundida desde el Ministerio, y permite realizar llamadas al 016, consultar medidas de apoyo, asesoría y protección; o consultar testimonios de mujeres maltratadas. Ha sido descargada por unos 5.000 usuarios.
Estaba también la aplicación del Plan Nacional sobre Drogas, con alrededor de 1.000 descargas, orientada a padres, tutores, técnicos o cualquier persona interesada en saber cómo ayudar a una persona adicta a las drogas. Incluye mapas con centros de ayuda, testimonios de expertos e información sobre las sustancias más consumidas.
Igualmente, dependiendo de áreas del departamento de Moreno encotramos ‘Emprendemos’, una herramienta de ayuda para jóvenes que deseen emprender, y ligada al Injuve (el Instituto de la Juventud), cuya Web facilita desde la portada la descarga de la aplicación, que se ha instalado en unas mil ocasiones.
Aunque las líneas que tienden a cruzarse entre ambos también han llegado a Mallorca. Juan Manuel Moreno ha formado parte, además, del grupo de ‘Pensadores’, “creadores, intelectuales y profesionales” que analizaron el futuro de los medios y las tecnologías de la edición de 2013 de Talentya.
Serguey
Cuestionar una ley, la que sea, por parte de quien sea, no solo es lo que se espera de vivir en una democracia, sino que es lo que la permite mejorar.
Por esa regla de tres las leyes nunca habrían cambiado y permanecerían idénticas con el paso del tiempo.
No se olviden: las leyes, se cumplen, pero no son sacrosantas ni inamovibles y las cambia los que ganan las elecciones.