Una experiencia educativa convertida en arte
En las antiguas escuelas de Argomilla, Cayón, se encuentra un centro de atención y rehabilitación. En él, diferentes niños se juntan bajo la tutela de Equipo La Escuela (ELE) con quienes realizan diversas actividades y talleres.
“Tenemos un taller donde participan todos, ahí pintan, se juntan y hablan… Se pueden conocer, niños con mayores discapacidades. otros con discapacidades más normales, niños con problemas de conducta, otros con problemas de aprendizaje…” comenta Antonio Santiago Pedraz, de Equipo La Escuela, a EL FARADIO.
En los talleres hay un programa de integración, se realizan exposiciones, con actuaciones, (algunos lugares que han decorado son Santiago de Compostela, Salamanca, El Salvador..), “Nosotros vamos a los diferentes lugares con la marca del punto”.
Los puntos son su símbolo distintivo, con lo que buscan «reflejar el punto que aportamos cada uno, aunque unos tengan más facilidad o menos para repartir colores; da igual que quede feo o bonito, simplemente es coger un pincel con colores y adornar” comenta Antonio.
Nos cuenta, por ejemplo, una experiencia en la Feria Internacional de Artes en Castilla y León. Allí hicieron unos talleres en la Casa de Las Conchas. La participación fue muy grande, todo el que pasaba por allí, participantes, leoneses, turistas… Todos aportaban su puntito. Tras ello, la exposición estuvo alrededor de un mes en un edificio histórico como es La Casa de las Conchas.
También han ido a lugares como El Salvador, aunque de esto hace ya 4 o 5 años. Hubo un proceso de paz, un proyecto de puntos, ‘puntos en paz’, la idea fue pintar juntos y luego decorar en un callejón de viviendas, con el que todos estaban contentos y participando. En Santiago de Compostela, participó también la asociación amigos y familiares enfermos mentales, haciendo instalaciones y talleres en la calle.
«En pueblo cercano a Salamanca, una asociación nos llamó para hacer un proyecto de puntos, diseñamos un proyecto artístico participativo, dijimos que hicieran 30.000 puntos, ellos se quedaron un poco asustados ante tanta cantidad. Pero el caso es que empezaron a llamar a otros colectivos: colegios, asociaciones, secretariado de gitanos, colegios de fuera… entre todos hicieron 30.000 puntos. A primeros octubre se juntaron con los puntos. Se hicieron talleres de adultos con carpintería y demás. Todo ello para festejar su aniversario. Había mucha gente de Salamanca, Zamora etc. Allí no había discapacidad, solo gente, gente cogiendo sus puntitos.»
«También participamos en el trofeo Ana Botín, muy bonito, con una piedra tallada, pusimos también bolas de pasta de papel clavadas en el centro de mesa. A la gente le gusto y luego se las llevó de recuerdo a su casa», cuenta Antonio.
Equipo La Escuela está siendo protagonista, además, de un libro, un libro que están escribiendo acerca de ellos y las funciones que realizan. ELE tiene ya compromisos cerrados en Santander, donde están invitados al próximo ‘Arte peatonal’. «Nos encanta que nos lleven como propuesta artística, al lado de un pintor profesional. Integrados estamos todos, necesitamos no desintegrarnos.»
Leticia
Me parece una forma espectacular de integración! Gracias!!
Os deseo muchísimo éxito!
ELE
Muchas gracias Leticia